Las expectativas del mercado volvieron a deteriorarse en septiembre, un mes marcado por la derrota electoral del oficialismo en la provincia de Buenos Aires y la fuerte presión sobre el mercado cambiario. De acuerdo con el nuevo Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) difundido por el Banco Central (BCRA), los principales analistas privados ajustaron al alza sus proyecciones de inflación, revisaron el tipo de cambio y redujeron las estimaciones de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) para el próximo año.

El informe del organismo, que recopila las proyecciones de 42 participantes entre consultoras, entidades financieras y centros de investigación, indica que en septiembre la inflación habría sido del 2,1%, por encima del 1,8% previsto en el relevamiento anterior. Para octubre, las expectativas se ubican en torno al 2%.

Además, los analistas corrigieron sus proyecciones para los próximos meses: el consenso ahora apunta a que recién en enero de 2026 los precios podrían mostrar una suba mensual inferior al 2%. En cuanto al acumulado de 2025, el REM proyecta una inflación del 29,8%, lo que representa un incremento de 1,6 puntos porcentuales respecto del informe de agosto. Para los próximos doce meses, el mercado prevé una variación del 21,9%, es decir, 0,9 puntos más que en el sondeo anterior.

Menor crecimiento y estancamiento económico

En el plano de la actividad, las perspectivas también se deterioraron. El sector privado redujo su previsión de crecimiento para 2025 en medio punto, de modo que ahora se espera un PBI 3,9% superior al de 2024, cuando hace apenas dos meses la expectativa era del 5%.

Por otra parte, los analistas empeoraron su pronóstico para el tercer trimestre del año, en el que estiman una caída del 0,6%, mientras que la recuperación esperada para el último trimestre se moderó al 0,5%. “La proyección anual ya es menor que el arrastre estadístico que había dejado diciembre de 2024 (+4,3%)”, explicó el director de la consultora Outlier, Gabriel Caamaño.

Dólar y mercado cambiario: sin saltos bruscos pero con tendencia al alza

El informe del Banco Central también reflejó un ajuste en las proyecciones sobre el dólar oficial. Si bien los participantes del REM elevaron sus estimaciones, no prevén sobresaltos abruptos en el tipo de cambio. Para el cierre de octubre, proyectaron una cotización de $1.440, cifra prácticamente igual a la actual, aunque la encuesta fue realizada en los últimos días de septiembre, cuando el dólar mayorista todavía se ubicaba por debajo de los $1.400.

El mayor salto cambiario se espera para noviembre, inmediatamente después de las elecciones legislativas nacionales, con una devaluación del 4,1% que ubicaría al dólar en torno a los $1.500. Para el final del año, el mercado anticipa que el “billete verde” se ubicará en torno a los $1.536.

De confirmarse estas proyecciones, el tipo de cambio acumularía en los próximos doce meses un incremento del 24,1%, apenas por encima del aumento esperado para la inflación en el mismo período.