Por Guadalupe Norte
18 Mayo 2023
ACTUAR A TIEMPO. Nueve de cada 10 casos de cáncer de colon resultan prevenibles, afirman los especialistas.
En Argentina, el cáncer de colon representa la segunda causa de muerte -por cáncer- entre hombres y la tercera entre las mujeres (antes prevalecen las afecciones en las mamas y los pulmones).
Según las estadísticas del Instituto Nacional del Cáncer (INC) anualmente unas 7.500 personas fallecen producto de la enfermedad.
Además, se registran 16.000 nuevos diagnósticos por año. Ambos datos hablan sobre la necesidad de actuar a tiempo.
“Si actuamos de una manera oportuna, nueve de cada 10 casos resultan prevenibles. El gran problema es la falta de acceso a la información (sobre cuidados y tratamientos) que tienen los pacientes”, comenta el gastroenterólogo Cristian Ahumada. Eso hace que las consultas médicas se retrasen o directamente no se realicen.
“La estructura interna del colon está compuesta por diversas células que -conjuntamente- crean una mucosa. Cuando aparece algún factor que afecta su normal funcionamiento ellas arrancan a reproducirse sin control y terminan por acumularse en el órgano. Esa nueva masa de tejido (llamada pólipos) es la dentro de 10 años puede llegar a convertirse en cáncer”, explica el especialista en medicina interna. En ese sentido, existe una amplia ventana de oportunidades para cambiar dicho destino.
Causas frecuentes
Los pólipos aparecen por múltiples factores. Entre ellos, hay que recalcar el consumo excesivo de tabaco y alcohol; sumado a una mala alimentación. Por ejemplo, por dietas bajas en fibras, pero altas en grasas animales y ultraprocesados.
A ese combo explosivo se le añade llevar un estilo de vida sedentario. Trabajar sobre estas cuestiones forma parte de la prevención primaria e implica un potente “caballito de batalla” para evitar otra decena de patologías que ponen en riesgo muestro bienestar.
También se hace indispensable prestar atención a los factores genéticos.
Procedimientos
Para detectar los pólipos suelen emplearse dos alternativas. La primera es la videocolonoscopia.
“Al margen de brindar un diagnóstico certero este método es terapéutico porque nos permite extraer los pólipos detectados en ese mismo instante. Si bien se trata de un estudio invasivo el proceso es realizado con sedación para que el paciente no sienta molestias”, indica.
En la semana previa a la videocolonoscopia, la persona debe emprender una dieta blanca y tomar un purgante para limpiar el órgano de heces. El proceso tarda de 25 a 30 minutos y es ambulatorio.
La segunda opción de tamizaje es el test de sangre oculta en materia fecal.
“El set incluye un pequeño tubo de almacenaje y cepillo. Para obtener la muestra hay que realizar unos pinchazos sobre nuestra materia fecal con este elemento. Luego, el cepillo vuelve a su recipiente y una serie de reacciones químicas detectan si existen glóbulos rojos en la toma”, acota Ahumada.
Esos residuos sanguíneos (imperceptibles a la vista) confirman que algo anda mal; sea por pólipos u otra patología asociada a la secreción.
“La contra pasa porque igualmente necesitaremos recurrir a una colonoscopia para retirar los pólipos”, aclara el experto en enfermedades inflamatorias intestinales.
Desde 2016, en los CAPS y los hospitales que integran el Sistema Provincial de Salud (Siprosa) es posible acceder a la autotoma de manera gratuita.
Para obtener mayor información al respecto los interesados pueden comunicarse al teléfono 0800-4444-999 (Salud Escucha) o acudir a alguno de los centros de salud pública de la provincia.
En el calendario
De no disponer de antecedentes familiares es recomendable hacerse una videocolonoscopia preventiva entre los 45 y 50 años.
En caso contrario (si contamos con padres y/o hermanos que padecieron cáncer) lo mejor será realizarla 10 años antes de la edad que corresponde al pariente afectado.
El seguimiento médico debe ser el doble de rígido con las personas que poseen el síndrome de Lynch.
Sintomatología
El hecho de que aparezcan síntomas implica que la enfermedad avanzó.
El cuadro varía acorde al tamaño del tumor y su ubicación, sin embargo, desde el Instituto Nacional del Cáncer (INC) se sugiere acudir con urgencia al médico al:
- Notar sangre en las heces; sea mezclada o encima de ellas.
- Sufrir alteraciones del ritmo evacuatorio poco habituales en el pasado (como diarrea o constipación).
- Experimentar un adelgazamiento extremo sin causa aparente. Con anemia y/o astenia incluidas.
- Sentir molestias o dolores abdominales persistentes.
Aplicación: herramienta de ayuda en el celular
En el ámbito de la prevención podemos hacer uso de la herramienta virtual “Chequeá tu colon!” (www.chequeatucolon.com.ar). El sitio -de origen argentino- contempla una calculadora que ayuda a saber que nivel de riesgo de contraer cáncer de colon tenemos y en qué momento debemos realizarnos controles. El programa fue creado por los gastroenterólogos Lisandro Pereyra (coordinador del área de desarrollo de investigación del Hospital Alemán) y Leandro Steinberg (médico del Hospital Universitario Fundación Favaloro y del Hospital Durand).
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