04 Marzo 2023 Seguir en 
DESCENSO CON CUIDADO. El artefacto pesa más de 280 kilos, por lo que las tareas deben ser realizadas con precaución para evitar cualquier inconveniente. LA GACETA/FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
Lo artístico y lo ritual muchas veces van de la mano. Y lo vivido ayer al mediodía en el teatro San Martín así lo confirma, con el tradicional descenso de la espectacular araña que domina la sala principal del centenario coliseo de avenida Sarmiento 601 para su limpieza, mantenimiento y reemplazo de focos.
Estas tareas se realizan todos los años, justo antes del comienzo de la temporada respectiva; en esta oportunidad, el escenario cobrará vida el viernes próximo, con la reposición (con entrada gratis) de la ópera de Wolfgang Amadeus Mozart “La flauta mágica”, a cargo de la Orquesta y el Coro Estables, el Coro de Niños y Jóvenes, e integrantes del Ballet Contemporáneo y del Taller de Circo del Ente Cultural de Tucumán.
IMPONENTE. La araña que cuelga sobre la platea del teatro San Martín tiene una altura de 4,5 metros y un diámetro de tres metros. Todos los años se la revisa. LA GACETA/FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
UNA VERDADERA JOYA. La gran luminaria está embellecida con 35.000 cristales que fueron especialmente importados desde Austria. LA GACETA/FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
LIMPIEZA. El plumero es fundamental para lograr un brillo adecuado. LA GACETA/FOTO DE ANALÍA JARAMILLO
REEMPLAZO. Los focos quemados se descartan para tener plena luz. LA GACETA/FOTO D E ANALÍA JARAMILLO
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