Una familia tipo tucumana necesitó $ 3.871 diarios para no caer en la pobreza

Una familia tipo tucumana necesitó $ 3.871 diarios para no caer en la pobreza

Los mayores incrementos en la canasta se dieron en frutas y en verduras, según el Isepci.

LA GACETA / FOTO DE JOSÉ NUNO LA GACETA / FOTO DE JOSÉ NUNO

¿Cuánto necesita una familia tucumana para no caer en la pobreza? En octubre, un matrimonio con dos hijos precisó $ 120.005 o $ 3.871 por día para costear la Canasta Básica Total (CBT) que contempla los gastos alimentarios más las erogaciones básicas para sobrevivir. ¿Y cuánto se requirió para adquirir los alimentos mínimos? De acuerdo con los cálculos del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), una familia tucumana necesitó $ 53.100 mensuales. Ambas canastas subieron un 6,7% durante octubre, por encima de la inflación medida por la Dirección de Estadística de la Provincia (5,4%). La variación interanual es de 107,99% para la CBA y de 98,78% para la CBT. Mientras que en lo que va de  2022, el nivel general tuvo una variación de 84,4% (CBA) y 77,35% respectivamente (CBT).

En el desagregado del reporte al que accedió LA GACETA se observa que el mes pasado hubo un fuerte incremento de los precios de las verduras y de las frutas en los negocios de barrio, una característica particular del relevamiento del Isepci. El reajuste mensual ha sido del 17,7%, impulsado por el reajuste en el valor de las naranjas (100%), del zapallo (78%) y la banana (62,5%), entre otros productos. En lo que va del año, el precio de los productos en las verdulerías creció un 148%, mientras que los artículos de almacén en los comercios de barrio creció un 87% en el mismo período. En las carnicerías, a su vez, la expansión del valor de los cortes ha sido del 55,4% entre enero y octubre pasado. El mes pasado, los mayores incrementos se observaron en el costo del espinazo (25%) y en el pescado (11%), según el diagnóstico del instituto coordinado en Tucumán por el economista Ernesto Gómez Rossi.

La aceleración inflacionaria se evidenció en los artículos de primera necesidad, particularmente aquellos vinculados con el harina. Ese producto subió un 150% durante este año, influyendo en el precio del pan (135%) y de los fideos guiseros (133%). También resultó más caro el desayuno y la merienda: el café, por ejemplo, subió un 200%, mientras que el azúcar lo hizo a razón de un 185%.

En ocho provincias medidas por la Fundación Colsecor, la Canasta Básica Alimentaria para una familia tipo se situó en $57.876, mientras que en el caso de un núcleo familiar integrado por dos y tres personas, fue de $28.095 y $46.076 respectivamente. La cifra ascendió a $60.873 teniendo en cuenta hogares conformados por cinco personas. "Observamos cambios en relación al bloque de frutas y verduras, que ocupan el 21% del total de esta canasta, contra el 28% de la carne vacuna. Al inicio de esta serie en junio del año pasado, encontrábamos que la carne vacuna ocupaba el 32% del total de la canasta y las frutas y verduras el 15%. Se gastaba el doble en carnes que en frutas y verduras. Hoy es parejo lo que se gasta en ambos grupos de alimentos, lo que muestra el fuerte aumento registrado por los vegetales y frutas", indicó la socióloga Natalia Calcagno, coordinadora del estudio.

Por su parte Alberto Calvo, del área de relaciones institucionales de la Fundación Colsecor, sostuvo que "por segundo mes consecutivo el bloque de frutas y verduras explica casi la mitad del aumento de este mes, en el que la papa nuevamente es el producto de mayor impacto en el aumento y por tercer mes consecutivo tiene incrementos por encima del 20%. Este bloque por sí solo, es responsable de casi un tercio del aumento de la canasta del mes de octubre. Parte de la explicación que dan especialistas y productores es que por un lado se sembró poco este año por distintas circunstancias y por otro hay cuestiones estacionales, aunque estas últimas no podrían explicar la totalidad del aumento. El incremento de este grupo de alimentos es muy homogéneo en todas las localidades. No así el aumento de la dispersión de precios según la localidad en productos como el pan, donde encontramos casos de estabilidad de un mes a otro hasta incrementos de más del 30% en el kilo de este producto".

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios