UNA PAREJA. Dos hembras preñadas serán las primeras de su especie en regresar a la yunga tucumana. Reserva de Horco Molle
Desde hace 70 años a las yungas tucumanas les falta un actor importantísimo. El tapir, “arquitecto del paisaje”, se extinguió de nuestra selva por la destrucción de su hábitat, la presencia de ganado y la caza. El tiempo ha pasado y el ecosistema se ha recuperado. Y estos animalitos pronto volverán a casa.
Para difundir el Proyecto Tapir, que lleva a cabo el proceso de reintroducción de la especie en el Parque Sierra de San Javier, se realizará mañana la primera Maratón por el Tapir. “La idea surgió con el objetivo de visibilizar todo lo que se está haciendo y también para concientizar a la población de lo que se va a hacer en la propiedad universitaria con los tapires -explica Rodolfo Salinas Collado, director del Parque-; es imprescindible que la gente conozca sobre este animal que es importante para la biodiversidad y la conservación de otras especies”.
El proyecto, impulsado por la Reserva Experimental de Horco Molle, reintroducirá una pareja de tapires hembras preñadas, luego un macho, y en un periodo más largo, más ejemplares. “Va a ser un impacto gradual y no visible en el corto plazo, porque hablamos de seis animales en primera instancia. El proceso va a llevar 10 o 20 años; todo en ecología tiene esos tiempos, que son muchos más largos que la paciencia humana”, advierte Juan Pablo Juliá, director de la reserva.
Liberadas en febrero
Según cuenta Juliá, la liberación -que estaba planeada para este diciembre- se hará finalmente en febrero, ya que hubo un “incidente” y se robaron los cercados (para contener a los animales) y las antenas (para controlarlos vía satélite). “Ya está listo el primer collar de control y el segundo lo estará pronto -dice-; y darle la máxima difusión es clave para conseguir el apoyo de la ciudadanía y que todos seamos guardianes de los tapires, y sepamos que esto no implica ningún riesgo para las personas, sino que significa una puesta en valor de nuestros ecosistemas”
En este sentido, la vuelta de los tapires representa hito en su ambiente. “Son arquitectos del paisaje, modifican los ambientes donde están y los hacen más diversos, o sea que permiten albergar mayor número de especies”, comenta Juliá.
El evento
La maratón de este sábado tendrá dos carreras: una participativa, de 3 kilómetros, y otra competitiva de 10. “La largada va a tener lugar en la Reserva de Horco Molle a las 17 horas, y la acreditación empezará a las 15. Allí va a haber una feria artesanal, música y entrega de premios a los participantes. La idea es difundir el proyecto, entonces van a haber juegos interactivos y los visitantes van a poder saber cómo vive el tapir, cómo se relaciona... Es una actividad para toda la familia, porque podés hacer una caminata participativa por el circuito que ya está demarcado”, adelanta Salinas Collado.
“Es importante que la gente aprenda sobre ellos, un poco para quitar ese temor a lo desconocido. Son animales grandes, pero solitarios, estrictamente herbívoros, muy pacíficos y no son numerosos. Aún cuando recuperemos a la especie, no es un animal que vamos a cruzarlo todos los días en la selva de San Javier -subraya Juliá-; y son animales importantes ecológicamente y forman parte de nuestro patrimonio y acervo ecológico y natural. Tenemos que aprender a valorar y apreciar nuestra naturaleza, y es todo un proceso que empieza desde chicos. A veces somos muy conscientes de los problemas de los elefantes y las jirafas y no de las dificultades que tenemos con nuestros animales aquí”
Cómo participar
La inscripción ya se encuentra abierta y se puede realizar online en el sitio https://forms.gle/k81e7SG1tssxKSS87. El costo de inscripción a las dos carreras (competitiva y participativa) es de $ 500 o de $ 1500 con una remera del evento; se puede abonar por transferencia bancaria o el día del evento. Los interesados también pueden acreditarse ese mismo día desde las 15 horas en la largada: Residencias Universitarias de Horco Molle - UNT








