Por Olga Inés Pintado
21 Noviembre 2021
Si nombramos a Leonardo da Vinci, seguramente lo primero en lo que pensamos es en La Mona Lisa y La Última Cena, sus pinturas más famosas.
Leonardo da Vinci nació en la provincia de Florencia, Italia en 1452 y murió en Amboise, Francia en 1519. Fue una persona que hizo muchas cosas diferentes. Fue un amante de la naturaleza, anatomista, humanista y pintor, entre otras. Algunas de estas cosas las hizo porque las necesitaba para otras. Estudió en detalle el cuerpo humano para realizar correctamente sus pinturas.
También fue un gran inventor. Tuvo ideas increíbles para la época, como el helicóptero, el submarino y el automóvil, pero sus conocimientos de física eran muy limitados como para poder avanzar en esos proyectos.
Como muchos pintores de su época, trabajó para la iglesia, pero al demorar demasiado tiempo en terminar sus obras, dejaron de contratarlo. Se cuenta que había sido contratado con otro pintor y cuando Leonardo había terminado de armar el andamio que necesitaba, el otro había terminado su trabajo. Quizás cuidaba todos los detalles o quizás era desorganizado.
Al no tener trabajo se mudó a Milán en donde fue contratado por Ludovico Sforza , el conde de Milán. En esta época comenzó a hacer sus primeros trabajos importantes. No sólo trabajó como pintor, también hizo trabajos de ingeniería, construyó algunos edificios y participó de la terminación de la cúpula de la Catedral de Milán. En esta época dibujó el Hombre de Vitruvio, en el que muestra las proporciones en lo que él consideraba era el cuerpo humano ideal.
Mientras trabajaba para Ludovico Sforza fue el organizador de los eventos y fiestas del ducado, incluso organizó el casamiento de Ludovico con Beatriz de Este. También cocinaba e inventó algunas cosas para facilitar el trabajo en la cocina como molinillos de pimienta, morteros mecánicos, cascanueces y un aparato para sacar las ranas de los recipientes con agua para beber, entre otros. Algunos fueron muy buenos y otros no tanto.
Cuando los franceses invadieron Milán, Sforza huyó a Alemania y Leonado se quedó sin su mecenas. Estuvo trabajando en distintos lugares como Florencia, Venecia y Roma. Luego volvió a Milán en donde comenzó su obra más famosa, La Mona Lisa.
En 1516 se fue a Francia, contratado por el rey, en donde falleció unos años más tarde. Leonardo no se casó, ni tuvo hijos y dejó su legado a su discípulo preferido, Francesco Melzi.
Leonardo no fue un artista muy prolífico, no publicó ninguno de sus trabajos de investigación, pero quedaron sus dibujos y sus cuadernos de apuntes y sus diarios que tienen toda la información de sus trabajos, sus inventos y sus viajes. Hizo un estudio muy completo sobre el vuelo de los pájaros, estaba obsesionado con la construcción de un aparato volador.
Muchas de sus notas son muy ordenadas y parecería que estaban listas para ser publicadas. Escribía con la mano izquierda y lo hacía de derecha a izquierda lo que hace difícil de leerla. Era una escritura en espejo. No se sabe si lo hacía de esta manera porque le resultaba más cómodo o porque era un excéntrico.
Los escritos de Leonardo da Vinci se encuentran en los mayores museos y bibliotecas del mundo, como en el Museo de Louvre, La Biblioteca de España, la Biblioteca Ambrosiana de Milan, etc.
Leonardo Da Vinci fue uno de los grandes genios del Renacimiento y como tal lo recordamos. Hizo cosas geniales, algunas no tanto y tuvo algunos fracasos y defectos, como muchas de las personas que se destacaron por algo que hicieron. No debemos olvidarnos de que son seres humanos y como tales tienen cosas buenas, regulares y malas, lo importante es que nos acordemos de las mejores cosas que hicieron.
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