Enfrentamiento en la plaza Urquiza: los padres de dos chicos se negaban a ir a buscarlos

Enfrentamiento en la plaza Urquiza: los padres de dos chicos se negaban a ir a buscarlos

Situación complicada.

CUSTODIA. Al menos 30 policías estuvieron en el paseo público. CUSTODIA. Al menos 30 policías estuvieron en el paseo público.
02 Octubre 2021

“Los padres de dos chicos no querían venir a buscarlos porque estaban enojados por lo que habían hecho sus hijos. Pero después de hacerles entender lo que sucedía, terminaron aceptando”, explicó el comisario Juan Ibáñez. “A veces tienen esta reacción porque creen que es un buen castigo. Nos dicen ‘dejelo ahí jefe, quizás así aprenda’”, explicó el titular de la Dirección de Guardia Urbana.

El funcionario destacó que, después de la “Guerra de las gorras”, se decidió montar un operativo de seguridad con la participación de unos 30 efectivos que vigilaron Plaza Urquiza y las adyacentes. “Este no se trató de un operativo especial, sino de una decisión de normalizar el lugar que tuvo un importante crecimiento”, indicó.

Ibáñez se mostró sorprendido y dolido por lo que sucedió. “A veces no entendemos. Había mucha presencia policial y lo mismo hubo problemas. Creo que hay jóvenes que no tienen en claro sus valores y hay una enorme falta de respeto hacia la fuerza policial”, opinó. El subsecretario de Seguridad José Ardiles también se mostró contrariado con la detención de siete adolescentes. “Es increíble que tengamos este tipo de problemas. Necesitamos de manera urgente el cambio de la ley de contravenciones policiales para que esto no ocurra más”, comentó.

“Es sumamente difícil que se cambien las cosas si es que no hay una sanción. Estos chicos fueron demorados hasta que son retirados por sus padres. Vuelven a su casa como si nada. Los mayores, al menos, deberían pagar una multa como castigo”, agregó el funcionario.

En la plaza Urquiza, los policías expresaban su sensación sobre la tarea que estaban realizando. “Este es el peor trabajo que debemos hacer. El tema de los menores es muy delicado porque no les podés hacer nada. No digo castigarlos, sino hacer que entren en razón. Ellos saben y se aprovechan de esa situación”, opinó una agente que ya tiene más de dos años en la fuerza. “Tenemos miedo a que nos denuncien”, agregó.

Ardiles, sobre el tema en particular, indicó: “es cierto que es una situación complicada y que no es sencillo realizar operativos donde están involucrados menores. Pero ellos saben que si actúan como dicen las leyes, no tendrán ningún tipo de problemas por realizar su trabajo”.

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