Por Santiago Re
08 Septiembre 2021
LA CONSTANCIO VIGIL Y FRANCIA. Ayer una banda atacó a golpes a una familia y les robó su vehículo. LA GACETA / FOTO DE DIEGO ARÁOZ
“Tengo 66 años, no sé de dónde saqué fuerzas para resistirme al asalto. A mi señora, a mi hija y a mí nos pegaron sin piedad; eran tres tipos de entre 22 y 26 años”, explicó Guillermo Yanicelli, vecino de Yerba Buena que sufrió un violento asalto el lunes a las 21 en la puerta de su casa. El hombre deberá hacerse una tomografía para descartar cualquier tipo de lesión más severa.
La entradera ocurrió cuando Yanicelli volvía a su hogar, en la zona de Constancio Vigil y Francia. El hombre ingresó a su vivienda, y, según explicó, dejó la puerta abierta porque tenía que salir de nuevo en ese momento. “Cuando salgo para subirme al auto veo que había dos jóvenes que habían saltado el portón. La vi venir y cerré la puerta, porque adentro estaban mi señora, mi hija y mi nieto. Es lo único que me importaba”, señaló el damnificado, en una entrevista que le brindó a LA GACETA.
Al grito de “¡Danos la plata!”, los asaltantes corrieron hacia el dueño de casa y le asestaron un culatazo en el pómulo. Yanicelli se resistió como pudo hasta que lo derribaron y empezaron a patearlo en el suelo. El hombre atinó a gritarle a su familia que no abrieran la puerta, pero aparentemente no lograron oírlo. Sin saber lo que afuera ocurría, su esposa abrió la puerta y vio la salvaje escena.
Sin escrúpulos
Al ver la oportunidad, uno de los delincuentes arremetió contra la señora y le pegó con la culata de una pistola en la cabeza. La mujer dio un grito que, según cuenta su marido, fue lo que llegó a alertar a los vecinos. Desencajado, el ladrón golpeó en el rostro a la hija del matrimonio. “Fue realmente terrible; en un momento así no te importa lo material sino tu familia y no podíamos hacer nada”, subrayó Yanicelli, que dice que la sensación del día después es la de no querer salir nunca más a la calle. “Queda esa sensación horrible de que podés salir a comer una hora y te puede volver a pasar algo así, o peor”, agregó.
Finalmente comenzó a sonar la alarma vecinal y los delincuentes abortaron su procedimiento. En su escape, uno de los ladrones encontró la llave del vehículo familiar, un Citroën C4, y ambos agresores escaparon en el rodado.
Un tercer cómplice esperaba en un Volkswagen Gol color blanco. Más tarde, luego de que fuera asistido por los médicos, los vecinos le contaron a Yanicelli que el auto blanco estaba estacionado en la cuadra desde las 18. “La verdad, no sé si me buscaban a mí precisamente o si entraron a la casa en la que vieron la oportunidad. Sí sabemos que estuvieron de guardia”, analizó el hombre, que deberá continuar los estudios médicos esta semana.
Rápida reacción
“Estamos trabajando con pistas firmes sobre esta investigación. Llegamos al lugar a los pocos minutos y, con la información que nos dio la familia sobre el vehículo y los autores, se irradió un pedido de secuestro en el acto”, explicó el comisario Carlos Daniel Ruiz, jefe de Zona de Yerba Buena.
En los procedimientos, intervino también el personal de la nueva seccional 15ª, de barrio Manantial Sur. Los efectivos de esa comisaría, alertados sobre lo ocurrido, vieron pasar raudamente el vehículo por una calle de ese barrio. Dos patrulleros siguieron a los sospechosos, que finalmente descendieron del Citroën y escaparon por los techos de las casas.
El vehículo permanece secuestrado en una comisaría. Antes de que sea devuelto a su propietario se le realizarán todas las pericias pertinentes para dar con los responsables.
Asistencia rápida
“Se portó muy bien la Policía, se calentaron, encontraron el auto rápido y además nos asistieron. Como la ambulancia se demoraba me llevaron al hospital Carrillo porque temían que pudiera sufrir un infarto, por mi edad y por el shock del momento”, concluyó la víctima. “Habíamos dado aviso al servicio de emergencias, pero ante la demora creímos que podía ser peor la espera para este caso puntual”, explicó Ruiz. “Los médicos del Carrillo lo atendieron por sus lesiones y le dieron el alta”, subrayó el comisario.
En el barrio los vecinos señalaron que no es la primera vez que ocurre un ataque de estas características. “Hace unos meses una banda en una camioneta VW Amarok entró a una casa en la que vive una mujer con sus nietos. No los lastimaron pero les llevaron todo”, contó Celina M. “Es preocupante, además de la inseguridad, lo que demora en llegar una ambulancia”, comentó por último la joven.
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