Cómo influye la publicidad en la alimentación no saludable

Cómo influye la publicidad en la alimentación no saludable

La población más susceptible es la infancia y adolescencia, afirma el estudio hecho por Unicef.

MALA ALIMENTACIÓN. Una práctica que no debe ser naturalizada. MALA ALIMENTACIÓN. Una práctica que no debe ser naturalizada.
12 Mayo 2021

Uno de cada dos niños reconoce haber comprado un producto comestible no saludable porque lo vio en una publicidad en los últimos tres meses, según una reciente investigación de Unicef sobre la exposición de esta franja etaria al marketing digital de alimentos y bebidas en la Argentina, que se encuentra en el primer puesto de la región en sobrepeso en menores de cinco años, informa Télam en su portal de noticias.

“Uno de los factores que incide en la mala alimentación en Argentina en los niños es la alta exposición que tienen y cuán susceptibles están frente a una estrategia de marketing agresiva que busca que las personas tengan preferencias nutricionales para consumir productos comestibles que generan ganancias pero no son alimento”, aseguró Fernando Zingman, especialista en salud de Unicef Argentina.

Se trata de publicidad a la que los chicos acceden a través de redes sociales como Instagram, YouTube y Tik Tok, que tienen mucho más impacto que la televisión. Ocho de cada 10 chicos admitió que ve publicidad cuando navega en esas redes.

“Al hacer un análisis por franja etaria, el grupo que más reconoció pedir productos por verlos en comerciales fueron los de entre cinco y ocho años, aunque la influencia también es fuerte en los menores de esa edad; este dato es clave porque sabemos que los hábitos alimentarios de la primera infancia inciden de por vida”, señaló Zingman.

Al respecto, el especialista en salud sostuvo: “si bien hay diferencias según la situación económica y social de los niños, en ningún caso la respuesta sobre el consumo influenciado por publicidad fue menor del 45%”.

“El valor de este estudio es que documenta el impacto de estas acciones sobre el consumo de la población más susceptible como es la infancia y adolescencia”, agregó.

Regulaciones

“Se pone en evidencia la necesidad de avanzar en el diseño de sistemas y políticas que regulen la comunicación de alimentos y bebidas no saludables en medios digitales en Argentina, uno de los aspectos que está contemplado en el proyecto de ley sobre Promoción de una alimentación saludable, que ya tiene media sanción en el Senado y que se encuentra en tratamiento en Diputados”.

A la hora de analizar las publicidades, Unicef encontró que la mitad es de productos altos en azúcares, y cuatro de cada 10 son altos en grasas saturadas y/o grasas totales. Sin embargo, en ninguna de las marcas se evidencia la presencia de contenidos destacados de nutrición, de educación para madres, padres o niñas, niños y adolescentes sobre nutrientes y tampoco explicación de packaging o tabla nutricional, ya sea en forma explícita o directa como en juegos o concursos, advirtió Zingman. “Se trata de prácticas que tenemos sumamente naturalizadas, pero cuando uno las estudia y las analiza críticamente comprende el impacto que tienen en la salu”

Estrategia

Según el organismo, algunas de las técnicas que utilizan estas publicidades para que los chicos y las chicas quieran comprar los productos son mostrarlos fuera del envase, lo que se utiliza para generar tentación; asociar la palabra diversión a la palabra sabor; usar jingles pegadizos; contratar a celebridades con bastante exposición vinculadas al mundo del deporte y la música para promocionarlos; y/o crear personajes de ficción que refieran a la marca.

En Argentina, un 14% de los menores de cinco años tiene exceso de peso y la cifra se extiende al 41% en los de cinco 5 a 17 años, según el organismo.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios