Debido a la covid-19, el papa Francisco renunció al lavado de pies del Jueves Santo

Debido a la covid-19, el papa Francisco renunció al lavado de pies del Jueves Santo

Años anteriores el sumo pontífice había repetido el ritual en cárceles, entre migrantes o en estructuras que acogen a personas con discapacidad.

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01 Abril 2021

Un Jueves Santo bajo las limitaciones por el coronavirus llevó al papa Francisco a saltarse el ritual del lavado de pies, que años anteriores había practicado en cárceles, entre migrantes o en estructuras que acogen a personas con discapacidad.

El sumo pontífice también dejó de lado la celebración de la Cena del Señor, que abre el triduo pascual, al cardenal Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio. Durante la tarde de mañana, Francisco celebrará la Pasión, y por la noche presidirá el Vía Crucis.

Este se realizará en la Plaza de San Pedro y no en el Coliseo, donde se reunían multitudes de romanos y de peregrinos cada Viernes Santo, antes de la pandemia.

Mediante una nota, voceros del Vaticano recordaron que el drama de la pandemia de coronavirus cambió las celebraciones en todo el mundo, y subrayaron que, al igual que el año pasado, será omitido el rito del lavado de pies, debido a las restricciones impuestas en muchos países.

Durante la llamada "misa crismal" de la mañana del Jueves Santo, en la que se bendicen los aceites que se van a utilizar durante los sacramentos, el Papa habló de las "cruces" que pesan sobre la humanidad. "Vivimos una época marcada por los escándalos; hay que rechazarlos como un veneno", dijo.

Debido a las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia en Italia, las ceremonias litúrgicas se desarrollarán con una presencia limitada de fieles en respeto de las medidas sanitarias previstas.

Hoy no ha habido noticias del Vaticano, ni siquiera del habitual almuerzo del Papa con grupos de sacerdotes romanos, cuando se celebra la institución del sacerdocio.

El año pasado, la cita se omitió por primera vez debido a la covid-19.

En la homilía de la Misa Crismal, el Papa habló de que "la cruz que no se negocia", y que está ligada a la relación con Dios, "no por masoquismo, sino por amor hasta el final".

Luego la mirada siguió sobre los más frágiles, empezando por los migrantes.

"La cruz está presente en la persecución de Herodes y en las penurias sufridas por la Sagrada Familia, igual a las de muchas familias que tienen que exiliarse de su tierra natal", subrayó Francisco.

El Papa celebró la misa en Coena Domini esta tarde en la capilla del apartamento privado del cardenal Angelo Becciu en el Palazzo del Sant'Uffizio, según información provista por fuentes cercanas al cardenal.

Este año, según el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni, las meditaciones del Viernes Santo fueron escritas por un grupo de niños scout de Umbria (centro de Italia) y de la parroquia romana de los Santos Mártires de Uganda.

Las distintas estaciones serán ilustradas por los dibujos realizados por niños que residen en casas de alojamiento de Roma, víctimas de discriminación.

El domingo de Pascua, el Papa dará la tradicional bendición Urbi et Orbi desde la basílica de San Pedro, durante la cual lanza un mensaje a los católicos y recorre los conflictos que azotan al mundo.

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