El aumento de casos en Tucumán y la nueva cepa ponen en alerta al Gobierno

El aumento de casos en Tucumán y la nueva cepa ponen en alerta al Gobierno

Desde que arrancó el verano hasta estos días, las consultas por casos sospechosos de coronavirus crecieron alrededor de 35%.

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La segunda ola de la Covid-19 ya está actuando en Tucumán. En los consultorios de febriles, decenas de tucumanos acuden para someterse a un análisis de PCR y corroborar si son o no portadores del virus. De acuerdo con los datos del Ministerio de Salud Pública de la provincia, desde que arrancó el verano hasta estos días, esas consultas crecieron en torno de un 35%. 

Los dos casos positivos con la cepa británica fueron aislados, domiciliariamente, apenas llegaron de las vacaciones en México, a fines de febrero. Hoy, el Instituto Malbrán confirmó las muestras de una cepa que tiene mayor índice de contagios que las otras que trascendieron a lo largo de la pandemia. 

La gestión del gobernador Juan Manzur ha definido fortalecer la vigilancia sanitaria. "Hay que estar alerta a todo lo que está pasando para que la curva de contagios no se dispare", dijeron fuentes cercanas al mandatario. Por caso, hoy se informó oficialmente que hubo 220 contagios en todo el territorio provincial. Y los casos siguen en ascenso. Ayer, a su vez, en el marco del Programa "Buscarte" cinco de 25 estudios efectuados en una zona concurrida de Yerba Buena resultados positivos para Covid-19. "La segunda ola está entre nosotros", indicó a LAGACETA.COM la ministra de Salud Pública, Rossana Chahla.

Los viajes estudiantiles y el arribo de los contingentes también se hallan bajo seguimiento. A los ocho jóvenes que llegaron el viernes de la gira por Carlos Paz se sumaron otros 10 chicos positivos para Covid (de un colectivo con 38 pasajeros), que se encuentran bajo aislamiento domiciliario durante las próximas dos semanas, confirmó la funcionaria. Para estos días esperan más contingentes y cada uno de los viajeros será sometido a un análisis preventivo.

La política no ha quedado al margen de esta segunda ola de contagio anticipada. El vicegobernador Osvaldo Jaldo se recupera en el Centro de Salud tras seis jornadas de internación y todo parece prever que el presidente de la Legislatura ha pasado la etapa más crítica de la enfermedad sin grandes contratiempos. En el mismo hospital se encuentran los intendentes Francisco Serra (Monteros), que trata de mejorar su cuadro clínico, y Carlos Najar (Las Talitas), que se sometió a una serie de estudios preventivos. En sanatorios privados, a su vez, siguen bajo tratamiento e internación los jefes municipales Raúl Moreno (Trancas) y Leopoldo Rodríguez (La Cocha).

Casi un año después del primer caso tucumano, el Sistema Provincial de Salud (Siprosa) se encuentra con un escenario de rebrote, pero con una reformulación del Plan de Contingencia Provincial sobre la base de dos ejes estratégicos: protocolos renovados para el modelo asistencial terapéutico y una reformulación del sistema de funcionamiento de salud.

El primer eje tiene que ver con las técnicas para la recuperación de pacientes y la asistencia prematura con sueros equino y de convaleciente e ivermectina, entre otros, antes del quinto día de transcurrida la enfermedad. También habrá un mayor seguimiento para pacientes mayores de 60 años (tomografías, laboratorios y factor de pronósticos, además del uso de las herramientas terapéuticas). Esas personas serán evaluadas 72 horas más que las anteriores para asegurarse que no tengan complicaciones; luego se le dará el alta correspondiente si se corrobora que la evolución es favorable.

El segundo eje está relacionado con la funcionalidad del capital humano del sector de la salud pública. En la primera ola de Covid-19, el Ministerio de Salud Pública había detectado que hubo 4.128 agentes sanitarios en la primera línea de acción sobre una dotación que supera las 16.000 personas. La intención oficial es incorporar la mayor cantidad posible de empleados, técnicos, administrativos y profesionales a las tareas vinculadas a la Covid-19, desde el hisopado hasta la atención en terapia. En este aspecto, en el Gobierno sostienen que la vacunación masiva al personal de la salud contribuye a ampliar la cantidad de personal que puede trabajar durante la segunda ola y que ya está inmunizada.

De todas maneras, en la Casa de Gobierno esperan una coordinación con la Nación. En ese sentido, la ministra Chahla tiene previsto viajar en estos días a Buenos Aires, con el fin de mantener reuniones presenciales con sus pares del NOA y, el viernes, en el marco del Consejo Federal de Salud (Cofesa), que será encabezada por la titular de Salud de la Nación, Carla Vizzotti. Hay tres cuestiones a debatir en ese ámbito: cómo se desarrollará el plan de vacunación en esta nueva etapa; el refuerzo en el sistema de vigilancia epidemiológica de frontera y cómo enfrentar la segunda ola en todo el país, un cuadro de situación que se esperaba para mediados de abril y que, en  muchos distritos, ya se anticipó su ingreso. "La presión epidemiológica es muy fuerte y una prueba de eso es la cantidad de pacientes que acuden a los consultorios de febriles", expresó la titular de Salud de la provincia.

No se descarta que, antes de fines de mes, los gobernadores sean convocados por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, para establecer acciones en caso de que la curva epidemiológica siga en ascenso. Según pudo establecerse en Buenos Aires, no hay posibilidades de volver a una cuarentena obligatoria. La idea del Gobierno nacional es mantener la economía en actividad, pero instando a todos los sectores a robustecer las medidas preventivas contra la Covid-19.

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