Cartas de lectores

Entre Paulina y Paola

Pasaron 15 años desde el crimen de Paulina Lebbos hasta el crimen de Paola Tacacho, dos extremos que desnudaron la impunidad judicial de Tucuman, el tráfico de influencias, la liberación de culpables y el pesar de muchas familias arruinadas por semejante maniobra del poder. En días puede prescribir el juicio de Paulina, "el crimen perfecto” como lo llamó su papá; se archivará sin culpables y no porque no existan, sino porque los protegieron. Ahora una muestra más de impunidad quedó reafirmada con la jubilación del juez que protegió al asesino de Paola y al que el gobernador Juan Manzur complació dándole semejante beneficio. Más allá de las luchas y las banderas, más allá de toda conveniencia, quiero preguntarle al Poder Judicial de qué lado está. Es evidente que no son todos, no todos en la vida son malos pero necesitamos ver a los buenos pronto, antes de que la desesperación nos supere y la Justicia pierda el respeto que constitucional y socialmente merece; el silencio los hará cómplice y la verdad siempre se sabe. Señores jueces y fiscales: ¿se preguntan en su sueño oscuro qué piensan sus familias de esto? Seguramente los cuadros honorosos que cuelgan con orgullo serán guardados por vergüenza algún día; sus nombres escritos y mencionados en la era corrupta de la impunidad serán el mal ejemplo del mañana. Saben bien ustedes que la Justicia siempre llega y algún día llegará para los tucumanos y los culpables pagarán. Para culminar, quiero aclarar que las víctimas de la impunidad son muchas y muchos tucumanos más; y por lo menos yo no pretendo olvidarlos.

Williams Fanlo

Condenados socialmente

Me dirijo al señor Presidente de La Nación a fin de resaltar su expresión “En la Argentina no hay Código Penal que sancione vacunarse o aplicar una vacuna a personas sin respetar el orden establecido para ello”; y es cierto pues él con esa afirmación demuestra no conocer lo que es ético, moral, principios, valores y por sobre todo el don de la verdad, el cual trae implícito la justicia, la libertad y el bien común, eje central de toda democracia sana. Por lo expresado quiero decirle al señor Presidente que quizás no sean condenados penalmente, pero sí ya están condenados socialmente; ya están condenados en su propia conciencia y por sus colegas políticos que no participaron, pero que están inmersos en la crisis de representatividad que desataron, pues muchos se aliaron al Presidente creyendo que venían a enmendar el pasado. Por eso le digo que el arrepentimiento es la mejor vacuna contra el error y si lo complementa con un “lo siento”, “me equivoqué”, “perdóname”, estará empezando una nueva vida en lo personal y en democracia. Dios lo bendiga y lo siga iluminando.

Jorge E. Farina

“¡Vergonzoso!”

El denominado vacunatorio VIP, con una lista conformada por 70 personas que fueron inoculadas contra la Covid-19, demuestra la falta de sensibilidad hacia sectores de la población en situación de riesgo y que por tal razón tienen prioridad para vacunarse. Lo ocurrido es vergonzoso, patético, resume de algún modo por qué nuestro país no es bien mirado en el mundo. Quienes deben dar ejemplo y contagiar al conjunto social no lo hacen. Por este hecho, y muchos otros que se visibilizan a diario, no nos va bien como sociedad. Falta madurez, concientización, respeto al prójimo, pensar en líneas generales y no en beneficios particulares. Es inadmisible que los sectores de poder sigan teniendo privilegios y sacando ventajas.

Marcelo Malvestitti 

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios