Gabriel Pereira
Doctor en Ciencia Política - Docente de la UNT
Un sistema de primarias es una forma de democratizar la democracia representativa, o sea, lo que intenta este sistema es generar más competencia entre determinados grupos para que un partido elija sus propias bases y que cada ciudadano o afiliado (depende del sistema), decida quién va a ir por esa fórmula. El sistema de primarias es muy bueno en este sentido.
Ahora, este sistema se tiene que implementar de una forma particular para garantizar que quienes votan en un sistema de primarias, logren decidir la fórmula con su voto. En nuestro caso, nuestro sistema de primarias (las PASO) tiene una falencia muy grande, porque no democratiza la decisión de quien va a ser el candidato o la candidata de determinada alianza o determinado partido. En realidad, lo que está haciendo es que sean esas alianzas o partidos los que decidan si presentan o no presentan diferentes alternativas dentro de su grupo.
Entonces, lo que nos termina pasando es que nos habían dicho que las PASO como sistema de primarias nos iba a ayudar para que nosotros, los ciudadanos, podamos votar quien va a ser el representante de mi lista o mi partido, pero después nos dijeron, en la letra chica, que el partido o la alianza decide si va a presentar alternativas y competencia para las PASO.
Como consecuencia, por ejemplo, si soy del partido demócrata, decido que va a haber una sola candidata, y cuando voy a la PASO, la gente va a votar solamente a mi candidato o candidata, entonces licuaron el mecanismo de representación.
Sumado a esto el problema de que las PASO, así como están, requieren mucho dinero, y terminan siendo una encuesta cara que se paga para ver qué candidato de cada alianza compite mejor frente a otros partidos, entonces nos terminan licuando la herramienta de participación y nos terminan haciendo un sistema representativo más caro.
En conclusión, considero que un sistema de primarias abiertas es necesario para profundizar la democracia representativa, para que sea más cercana a las decisiones de los ciudadanos y ciudadanas, lo cual es muy importante. Ahora, el sistema de las PASO como está hecho en este momento en Argentina, no está logrando que se cumpla con ese fin, sino que más bien se convierte en una herramienta muy útil para los partidos y las alianzas para medir las intenciones de voto sobre sus candidatos.