Protestas en Francia contra una ley que limita libertades

Protestas en Francia contra una ley que limita libertades

Unas 130.000 personas marcharon en distintas ciudades. Los enfrentamientos dejaron 62 agentes heridos y 81 detenidos. Denuncian brutalidad policíal contra periodistas y artistas.

“INACEPTABLE”. Macron dijo que la violencia policial contra el músico Zecler es “vergonzosa” para Francia. “INACEPTABLE”. Macron dijo que la violencia policial contra el músico Zecler es “vergonzosa” para Francia. REUTERS
30 Noviembre 2020

PARIS, Francia.-Los enfrentamientos durante una multitudinaria manifestación nacional en Francia contra la Ley de Seguridad Global, dejaron 62 policías heridos y otras 81 personas detenidas. Según cifras del Ministerio del Interior francés, un total de 130.000 personas se volcaron a las calles en el país, pero de acuerdo con un conteo realizado por los organizadores de la “Marcha de las Libertades”, fueron al menos 500.000.

La mayoría de las manifestaciones contra este proyecto, que restringiría el derecho de filmar a la policía, se desarrollaron en calma, pero en París estallaron violentos enfrentamientos al caer la noche.

Un total de 23 agentes resultaron heridos durante la concentración en París, el sábado.

Un grupo de encapuchados prendió fuego a una sucursal del Banco de Francia y la Policía intervino con cañones de agua para dispersar a los manifestantes.

Grupos de manifestantes, vestidos de negro, prendieron fuego a la entrada del Banco de Francia y a un restaurante adyacente, volcaron e incendiaron varios vehículos, y lanzaron piedras y palos a la policía, que respondió con gases lacrimógenos y cañones de agua. Otros 39 agentes resultaron heridos en el resto del país, según el balance de la cadena BFMTV.

Se informó que hay dos manifestantes heridos durante las protestas, y un fotógrafo sirio, identificado como Amir al Halbi, de 24 años y colaborador de medios como AFP o Polka Magazine, herido en la cabeza por “un porrazo” la Policía francesa, según denunció el secretario general de Reporteros sin Fronteras, Christophe Deloire.

El fiscal general de París, Rémy Heitz, recomendó que tres de los cuatro policías involucrados en la brutal paliza al productor musical de raza negra Michel Zecler -germen de la furia de los manifestantes- pasen a detención provisional y que un cuarto agente implicado permanezca bajo supervisión judicial, que también le impedirá seguir desempeñando sus funciones.

La agresión fue captada por las cámaras de seguridad y las imágenes fueron divulgadas por el portal “Loopsider”, que informó de que el agredido se topó con la patrulla policial cuando se encontraba a las afueras de un estudio sin mascarilla.

Los agentes fueron a su encuentro, lo que derivó en una paliza en la que, según Zecler, se profirieron insultos racistas.

Los hechos tuvieron lugar el sábado y desembocaron inicialmente en el arresto del productor, pero la difusión de las imágenes dio la vuelta al discurso y supuso no solo la liberación de Zecler y la retirada de los cargos, sino la suspensión de los agentes implicados, criticados públicamente por el ministro del Interior, Gérald Darmanin.

Según el fiscal, los policías implicados son un brigada de 44 años y tres integrantes de la comisaría del Distrito 17. Todos, según Heitz, reconocieron que la paliza a Zecler fue injustificada. Actuaron, dicen, por “miedo” ante la resistencia de Zecler y el lugar donde se hizo la detención.

El fiscal dijo que uno de los agentes reconoció que había arrojado una “granada antidisturbios” contra Zecler.

Según Heitz, el agente “justificó su gesto por su desconocimiento del contexto de la intervención y por la confusión que reinaba sobre el terreno”, según la rueda de prensa. Los agentes desmintieron haber gritado insultos racistas contra el productor en el momento de la paliza.

La agresión a Zecler fue instrumental en la celebración de la manifestación nacional contra la llamada Ley de Seguridad, según la cadena alemana “Deustche Welle”.

El controvertido proyecto considerado una mordaza a periodistas y ciudadanos, y lo acusan de intentar proteger a policías de las denuncias de brutalidad contra inmigrantes y minorías raciales.

El mayor rechazo es hacia tres artículos del proyecto, que enmarca la difusión de la imagen de la policía, el uso de drones así como imágenes de las fuerzas del orden tomadas por ciudadanos con sus teléfonos móviles.

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