Por Magena Valentié
03 Noviembre 2020
MONUMENTO HISTÓRICO NACIONAL. Una joya arquitectónica y cultural que los tucumanos no deben perder. la gaceta / foto de Inés Quinteros Orio
La pandemia pone a prueba la salud de los ancianos y los más vulnerables sin hacer distinción entre personas y edificios. Por eso, a pesar de las restricciones impuestas por la covid-19, las obras de mantenimiento del conjunto arquitectónico de San Francisco no se detienen. Los $895.481 recaudados en ventas de bonos y donaciones de la comunidad fueron invertidos por la comisión “Puesta en valor del patrimonio cultural de Tucumán” en el mantenimiento y recuperación del conjunto arquitectónico más importante de Tucumán.
“Durante 2020, y a pesar de la pandemia se han podido realizar estudios y acciones preventivas gracias a los aportes que los tucumanos”, dice la arquitecta Olga Paterlini de Koch, presidenta de la comisión y representante de la Comisión Nacional de Monumentos Históricos que por estos días celebra los 80 años de su creación. Con los recursos económicos aportados por la comunidad se consiguió:
- En octubre de 2019 y setiembre de 2020 realizar mantenimiento de cubiertas, limpieza y destranque de canaletas, embudos, descargas y albañales; reparación de desagües de sacristía, eliminación de vegetación parásita, sellado de grietas y fisuras. Esto permitió transitar el verano sin dificultades.
- Relevamiento integral de desagües, pruebas hidráulicas de pluviales y de cloacales.
- Informe de elementos contra incendios y proyecto de sistema de mallas de acero para la nave principal de la iglesia, para caída eventual de escombros.
- Proyecto de actualización del sistema de iluminación. Gestiones ante la Dirección Nacional de Arquitectura para la ejecución del nuevo proyecto.
- Gestiones ante la Dirección de Espacios Verdes de la Municipalidad para la puesta en valor de los jardines del claustro.
- Se encuentra en ejecución la restauración de la pieza Nº 4 del Via Crucis afectada por un desplome desde hace unos años; el proyecto tiene como propósito final la restauración de todas las piezas del conjunto. El equipo de restauradores está a cargo de la licenciada Beatriz Cazzaniga.
“En próximas intervenciones se continuará con la puesta en valor de la capilla de San Francisco Solano. Se conserva la casulla que usaba el santo en el siglo XVII, cuando celebraba la misa en Ibatín cuando la ciudad aún no se había trasladado a su sitio actual”, explica Paterlini.
La Iglesia y el convento de San Francisco constituyen un conjunto arquitectónico con elementos arqueológicos de la orden jesuítica que ocupó esa manzana, entre 1685 y 1776. Antes de irse los jesuitas dejan a los franciscanos los edificios que los nuevos ocupantes se encargaron de transformar. Hoy San Francisco es Monumento Histórico Nacional y la manzana jesuítica es Lugar Histórico Nacional.
Quienes deseen colaborar con el patrimonio pueden hacerlo a la Cuenta corriente del Banco de Galicia Nº 18477-9-089-2. Provincia Franciscana de la Asunción de la Santísima Virgen. CBU Nº0070089420000018477920.
Lo más popular
