Pese a la brigada especial, el virus ingresó a Taco Ralo

La novedad tuvo un fuerte impacto en la comunidad de Taco Ralo. Después de 102 días de permanecer sin reportar ningún caso de residentes con covid-19, este sábado el virus doblegó la rígida barrera sanitaria que se había desplegado en el lugar.

El chofer de una ambulancia de La Madrid y su esposa, se constituyeron en los primeros pacientes contagiados de coronavirus. Así lo confirmó la comisionada comunal del lugar, Claudia Ferrari. En el lugar sólo había como antecedente el caso positivo de un médico de San Miguel de Tucumán que atiende ahí a pacientes Pami. Providencialmente, el profesional no contagió a nadie.

Ferrari, lamentó la noticia pero exhortó a que la batalla contra el virus no se afloje y destacó el fruto que dio hasta ahora la tarea comprometida de todos los miembros de ese pueblo, ubicado en el extremo sudeste de la provincia, a orillas de la ruta 157. “Fuimos los que más resistimos el ingreso de la covid-19 y sabíamos que tarde o temprano nos doblegaría. Llegó lamentablemente a través de un trabajador esencial. Ahora está el desafío de evitar más casos y la circulación comunitaria”, advirtió.

Comprometidos

La funcionaria aseguró que pese a los dos primeros positivos la gente del lugar “tiene plena conciencia que a este mal lo tenemos que frenar entre todos”. Indicó que en esa labor la población en general colabora de una u otra manera. El ejemplo lo brinda la brigada de voluntarios que trabaja a destajo para evitar la propagación de la covid-19. Está integrada por un grupo de jóvenes que sin percibir pago colabora con el puesto de control sanitario que se instaló en el acceso al pueblo.

También están los policías y empleados de la comuna que, al margen de las horas de trabajo que deben cumplir, salen y se suman durante cuatro horas a la guardia de control. No menos importantes son las rígidas medidas preventivas dispuestas por la comuna. Ninguna persona sin domicilio en el lugar puede ingresar al pueblo. Sólo pueden acceder los que cumplen servicios esenciales.

“En este puesto controlamos la temperatura de la gente de la Policía, del Caps, de los medios de transporte, otros que vienen y a entregar mercaderías. También a la que es de aquí, salió por distintas razones y regresa a su casa. Llevamos un registro estricto de este movimiento. Además se desinfecta los vehículos y se verifica que todos usen barbijos”, comentó la enfermera Melisa Galván.

La joven y su amiga la radióloga Verónica Britos son voluntarias y por día cumplen cuatro horas de guardia en el control. “Este sitio funciona las 24 horas gracias a todos los que sin ningún interés económico venimos a sumarnos a esta lucha que tiene el fin de evitar el avance del coronavirus en el pueblo”, apuntó Verónica.

“En esta barrera sanitaria se dan diversas situaciones. A veces hay gente que viene a visitar parientes y lamentablemente hay que hacerlos regresar pese a que algunos se resisten”, añadió. Comentó que la gente de otras localidades que llega a cobrar beneficios en el correo está obligada a permanecer en la entrada al pueblo hasta tanto arribe el camión de caudales. “Cuando se larga el pago se la hace ingresar pero obligándola a que cumpla el protocolo de bioseguridad”, apuntó Verónica.

El colectivo que cumple recorrido hasta esa localidad también es controlado. “Si hay algún pasajero que no es de aquí, necesariamente tiene que regresar a su destino”, comentó. Según Roberto Arnedo, vecino del lugar, Taco Ralo es una población tranquila porque la mayoría de los 5.000 habitantes está integrada por niños, adultos y ancianos. Los jóvenes son muy pocos. “Esta puede ser una de las razones por las que aquí casi no hay casi desbordes festivos. Y si los hay los mismos vecinos están alertas y los denuncian”, conjeturó.

La falta de fuente de trabajo es la causa principal por la cual los jóvenes abandonan el pueblo. La comisionada Ferrari dijo que su dependencia apuesta fuerte a tratar de hacer de Taco Ralo un destino turístico, generador de trabajo. Las aguas termales, de generosas virtudes terapéuticas, son el principal recurso de atracción a explotar.

Además de Taco Ralo, este sábado la localidad de Alpachiri también dejó de estar inscripta entre las pocas localidades que permanecían sin covid-19. Fue la comisionada comunal Fernanda Cano la que transmitió la noticia del primer caso positivo. Dijo que se encuentra en aislamiento hospitalario y sus contactos estrechos cumplen con el aislamiento correspondiente. Exhortó a los vecinos a continuar extremando las medidas de prevención, evitando las reuniones sociales, las salidas recreativas, respetar la distancia social y usar barbijo.