Inseguridad: noche de tiros y tragedia en el barrio Santillán

Inseguridad: noche de tiros y tragedia en el barrio Santillán

Un joven de unos 20 años fue baleado en el pecho y su cuerpo quedó tirado en la vereda; los vecinos oyeron disparos y gente que corría.

EL BARRIO SANTILLÁN. Los vecinos pusieron alarmas en los postes de luz y pidieron auxilio policial, pero sólo les dieron custodia durante una semana. EL BARRIO SANTILLÁN. Los vecinos pusieron alarmas en los postes de luz y pidieron auxilio policial, pero sólo les dieron custodia durante una semana.
06 Febrero 2020

Ayer a las 2 de la mañana, un joven de aproximadamente 20 años de edad fue baleado y murfió sobre la vereda de una casa ubicada en la calle Uruguay 3.036, en el barrio Santillán, al noroeste capitalino.

“El cuerpo presentaba un orificio de arma de fuego, sin orificio de salida a la altura del pecho, en el lado izquierdo. Es un sujeto joven que aún no fue identificado, y llevaba consigo una llave cruz. No estaba armado, aunque los testigos manifestaron haber escuchado dos disparos”, dijo Ramón Soria, prosecretario que estuvo encargado de coordinar las tareas investigativas en el lugar del hecho. “No descartamos nada, aunque pensamos que esta persona podría haber cometido acciones delictivas, y por eso fue abatido”, agregó.

Una mujer que vio al cuerpo en la vereda de su casa y alertó a la Policía, contó lo que vivió en ese momento, pero prefirió quedarse en el anonimato porque dijo sentir miedo por lo sucedido.

URUGUAY AL 3.000. El ataque habría ocurrido a las 2 de la mañana. URUGUAY AL 3.000. El ataque habría ocurrido a las 2 de la mañana.

“Estaba durmiendo con el aire acondicionado y, como tengo sueño liviano, me desperté porque escuché dos disparos. En ese momento me acerqué hasta la puerta para ver por una pequeña ventana que tenemos ahí. No quería salir porque tenía miedo de recibir una bala perdida”, dijo a LA GACETA.

Además, aseguró que el muchacho no estaba solo. “Cuando me acerqué a la puerta vi pasar a tres o cuatro chicos corriendo”. Y añadió: “más tarde, me di cuenta que había un chico tirado en la vereda de mi casa, porque mi perra ladraba furiosa contra ese rincón. Al principio no queríamos salir, ya que pensábamos que podrían estar escondidos ahí. Después me fijé, vi al chico tirado y automáticamente llamé al 911”.

Según su testimonio, no cree que la víctima haya sido ejecutada en la puerta de su casa. “Pienso que le dispararon en otro lado y que vino corriendo hasta caer acá. De todas formas, estaba con el aire acondicionado prendido y no pude escuchar bien si fue cerca o lejos”.

La vecina de la calle Uruguay no supo precisar cuántos disparos recibió el joven fallecido. “No estoy segura de cuántos tiros recibió. Yo escuché dos disparos, pero hay otros vecinos que dijeron haber escuchado tres”.

En el lugar del hecho no se veía ninguna mancha de sangre que delatara lo sucedido. “Supongo que no había sangre porque la pistola con la que le dispararon debe haber sido de pequeño calibre”, indicó la vecina. Investiga el hecho la fiscala de Homicidios, Adriana Giannoni.

Zona insegura

Nicolás Pérez, otro vecino consultado por LA GACETA, también aseguró haber escuchado los disparos. “Tipo una o dos escuché los tiros y a la mañana vi el cuerpo en la vereda”, señaló.

COMPLEJO. Los peritos buscaban huellas o restos de proyectiles. COMPLEJO. Los peritos buscaban huellas o restos de proyectiles.

“Esta es una zona bastante insegura. Ayer, a las 21.30 le robaron el celular a un chico a media cuadra. A la gente en las paradas de colectivo también les roban, es algo normal”, manifestó el joven de 29 años.

También dijo que hay un grupo de vecinos que tomaron cartas en el asunto y se encargaron de instalar alarmas en los postes de luz, y alertan cuando ven algo sospechoso haciéndolas sonar. “Hacen notas a las autoridades para que se solucione el tema, y una vez lograron que pongan un policía cuidando desde la esquina, pero estuvo una semana y no vino más”.

“Necesitamos más policías en la calle para controlar la situación. Es raro esto porque a dos cuadras hay una comisaría, y a otras cinco cuadras está la Jefatura de Policía, sobre la calle Italia”, explicó.

En este sentido, Pérez dijo que fue víctima de la inseguridad hace tiempo. El caso fue publicado por LA GACETA en febrero del año 2014, cuando unos delincuentes entraron a robar en el negocio familiar que tienen en la casa de la calle Uruguay al 3.000.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios