Neurociencias para potenciar y cuidar el cerebro

Neurociencias para potenciar y cuidar el cerebro

Una atractiva propuesta para acercar la ciencia a la vida cotidiana.

CIENTÍFICO Y DIVULGADOR. Manes plantea que la interacción con otras personas mejora nuestra capacidad para aprender y adaptarnos a los cambios. CIENTÍFICO Y DIVULGADOR. Manes plantea que la interacción con otras personas mejora nuestra capacidad para aprender y adaptarnos a los cambios.
20 Octubre 2019

Divulgación

Cerebros en Construcción

Facundo Manes y Maria Roca

(Planeta - Buenos Aires)

Las neurociencias pueden ir de la mano con lo cotidiano. Esa es una de las particularidades más atractivas del programa ¿Neuro qué? de Pakapaka, en la que el investigador Fabricio Ballarini busca de la escuela a su sobrina un día a la semana y le explica con calidez y a través de juegos cómo funciona el cerebro. De algún modo, esa estrategia también se encuentra presente en el último libro de los neurocientíficos Facundo Manes y María Roca, investigadores del CONICET y en la Fundación INECO (Instituto de Neurología Cognitiva). Cerebros en construcción es la segunda parte de Descubriendo el cerebro e intenta representar en sus páginas lo que sería la interfaz de un videojuego con muchas imágenes e ilustraciones, diferentes niveles, dificultades, consejos y ejercicios para aprender a cuidar y potenciar el cerebro.

A lo largo del libro se intenta poner en evidencia la interacción clave entre lo físico, lo intelectual y lo emocional, ya que el cerebro es parte de un todo indivisible en el cuerpo humano. Por eso son tan importantes la alimentación, el ejercicio físico, un buen descanso, aprender sobre las emociones, llevar una vida socialmente activa y mantener el cerebro abierto a las posibilidades y desafíos del futuro. Porque el cerebro se sigue construyendo a partir de los nutrientes que le brindamos todos los días; el ejercicio físico mejora el estado de ánimo y la capacidad para resolver problemas; el cansancio puede afectar nuestra capacidad para tomar decisiones; durante el sueño el cerebro sigue activo y se pueden encontrar respuestas creativas a los problemas; la interacción con otras personas mejora nuestra capacidad para aprender y adaptarnos a los cambios. Conclusiones que se relacionan estrechamente, derivadas de años de investigación y transformadas en consejos prácticos para pensar y vivir mejor. En definitiva, una atractiva propuesta para acercar la ciencia a la vida diaria y compartir la lectura en familia.

© LA GACETA

Máximo Hernán Mena

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