Padre Rafael Velasco: “la gente no tiene menos fe, lo que tiene es otra relación con Dios”

En la gran “redada” global, donde casi no quedan instituciones libres de sospecha, la Iglesia Católica no es la excepción. “Estamos en un momento complicado de la fe, a nivel institucional. Hay una gran reticencia por parte de un sector importante de la población hacia las iglesias, en general, no sólo la católica. Pero no veo que la gente tenga menos fe, lo que tiene es otra relación con Dios. La gente sigue vinculándose con Dios, a su manera. Pero no cuando la Iglesia dice, sino cuando la gente tiene necesidad. Hay experiencias de fe enormes como las procesiones a Luján, del Señor del Milagro en Salta o La Merced en Tucumán”, reconoce el superior de los jesuitas, provincial para la Argentina y Uruguay de la Compañía de Jesús, padre Rafael Velasco SJ.

El representante de la orden a la que pertenece el papa Francisco estuvo en Tucumán, invitado por las Hermanas Esclavas de Corazón de Jesús. En el Centro de Espiritualidad Ignaciana “Corazones Nuevos”, el sacerdote dio un taller sobre “Fe y justicia”.

- ¿Cómo imagina usted la iglesia en un futuro cercano?

- “Creo que hay que renunciar a esta idea de iglesias multitudinarias. Sí debemos volver a la comunidad. A las pequeñas comunidades, en las que la gente pueda sentirse que es parte de un espacio en donde se comparte la fe, la palabra y el pan, y que a partir de esa comunidad, debemos organizamos.

En el siglo XX, Karl Rahner, un teólogo extraordinario, que murió en 1984, decía que en el siglo XXI, el cristiano iba a ser un místico o no iba a ser cristiano. Es decir, o iba a ser alguien que tuvo experiencia personal de Dios o no. Creo que hay una llamada grande a que la Iglesia favorezca la experiencia de Dios. La pregunta ahora es ¿la Iglesia, como institución, es un lugar donde la gente pueda encontrar a Dios, o no? No nos preguntamos si encuentra sacramento, palabra de Dios o doctrina de Dios, sino si realmente encuentra a Dios y hace experiencia. En la medida en que sí lo haga, entonces la Iglesia va a revivir”.

- ¿La Iglesia debe participar de los debates actuales?

- La Iglesia está muy atenta a los tiempos complicados de la actualidad, eso implica meterse en el ojo del huracán. Alguien decía: el cura que ayuda a los pobres es un santo, y el que pregunta por qué hay pobres, es un cura comunista. Algo así está pasando actualmente. La Iglesia hoy está invitada no solo a ayudar a los pobres sino a trabajar por un mundo más justo, que lleva a preguntarnos por qué están algunas cosas como están, por qué los pobres están sufriendo la exclusión, por qué no tienen educación y salud como deberían. Eso trae connotaciones políticas partidarias, lo cual no debería ser así.

- ¿Cómo alimentar la fe y la reflexión entre los católicos?

- Desde la experiencia ignaciana que compartimos entre las Hermanas Esclavas y los Jesuitas, el propósito de este encuentro es muy bueno. Se trata de pensar, rezar, compartir. Es un espacio de reflexión y de compartir la fe. Se crece cuando se comparte, cuando uno tiene espacios para que alguien invite a la reflexión pero que después todos reflexionen.

El padre Velasco, tiene 52 años y nació en Córdoba. Es licenciado en Teología Espiritual por la Pontificia Universidad Comillas, Madrid. La Compañía de Jesús cuenta con 200 miembros, entre ellos, cuatro obispos. Su fundador fue San Ignacio de Loyola, famoso por sus ejercicios espirituales que se practican hasta hoy.