
ENSAYO. El maestro Buffo dirige a los miembros de la orquesta y del coro. LA GACETA / FOTO DE ANALÍA JARAMILLO.-.

HOY
• A las 22, en el Teatro Alberdi (Jujuy y Crisóstomo Álvarez). Entradas 2 x 1 con Club LA GACETA.
Se acerca la Semana Santa, y la Orquesta Sinfónica de la UNT, que dirige Roberto Buffo, se pone a tono esta noche con un concierto sinfónico-coral multimedial, que ofrece por tercer año consecutivo.
Mientras en la pantalla gigante se proyecten los momentos más relevantes de la película “La pasión”, y otras icónicas de la celebración cristiana, la orquesta abordará repertorio enfocado en el siglo XVIII, con música barroca y clásica.
Buffo eligió música que va del duelo a la celebración a través de la Sinfonía Trauer, de Pietro Locatelli; la Sinfonía N° 44, de Joseph Haydn; Fuga para cuerdas, Ave Verum Corpus y Tantum Ergo, de Wolfgang A. Mozart; Aria de la Suite N° 3 y Jesús Alegría de los Anhelos del Hombre, de Johann S. Bach.
Dos partes
“Las dos sinfonías trágicas, de Locatelli y de Haydn, son fúnebres, apropiadas para la celebración de Pascua, y las interpretaremos en la primera parte del concierto para representar la Pasión. Las otras cinco obras, que son cortas, van en la segunda parte, como para celebrar la Resurrección. No hay solistas, pero sí una masa coral de casi 160 voces. Son varios coros, tantos que no caben en el escenario”, explica Buffo.
Se refiere al momento en que lleguen las obras de Mozart y de Bach, en las que participarán Aula Coral de la Facultad de Medicina, dirigido por Mariana Stambole; Coral Exun, Ensamble Santo Domingo y el Coro del Colegio de Psicólogos, a cargo de Adrián Mendoza; Vox Animae Coral, conducido por Emiliano Flores y el Coro del Colegio de Arquitectos, bajo la dirección de Ignacio Meriles.
Buffo amplía detalles sobre las obras: “la sinfonía de Locatelli es típica del barroco, con movimientos cortos que se tocan enlazados, sin interrupciones. En cuanto a la de Haydn, es muy conocida, y muy dramática. El Ave Verum Corpus y Jesús Alegría del hombre son obras contemplativas mientras que el Tantum Ergo, de Mozart, es celebratoria”.







