"No me acuerdo", "No sé", "No". Estas fueron las expresiones más escuchadas ayer en la sesión del juicio que se les sigue a Francisco "Kello" Vallejo y a su sobrino Rodolfo "Tyson" Toscano por el triple crimen de Agua Azul. Allí, el 17 de junio de 2002, fueron asesinados Juan Carlos Brandán, de 49 años, y sus hijos Roberto y Juan Carlos, de 19 y 17 años.
Durante la audiencia declararon algunos vecinos de Agua Azul, un pueblo de Leales en el que, según apreció la fiscal de Cámara Juana Prieto de Sólimo, abundan los Juárez, los Soria, los Vallejo y los Brandán. Y donde casi nadie parece saber qué pasó la noche de la tragedia.
Ramón Juárez, Jorge Juárez y Francisco "Panchulín" González fueron los tres testigos que escucharon ayer los jueces Pedro Roldán Vázquez, Carlos Norri y Julio Espíndola Aráoz. Se trata de primos o hermanos de otros testigos, y lo único que pudieron hacer fue confirmar que, poco antes de que se consumara el brutal ataque, tanto las víctimas como los acusados habían estado compartiendo "tres damajuanas de vino". Antes habían jugado un partido de fútbol (casados contra solteros) que ganaron los primeros.
Ninguno de ellos, sin embargo, pudo advertir si había alguna animosidad entre los Brandán, y Vallejo y Toscano. Los vecinos dijeron que casi todos se retiraron -como mínimo, "entonados"- una hora antes de la medianoche. Poco después, los tres Brandán fueron asesinados. Juan Carlos Brandán mantenía una vieja rivalidad por tierras con Vallejo, y le había hecho varias denuncias por cuatrerismo, según los investigadores.
Las posibilidades
Tanto la fiscal como Mirna García Soria de Aráoz y Gonzalo Ortega, representantes de la querella, pretenden establecer si, tal como ellos sostienen, los dos imputados contaron con la colaboración de otras personas.
El defensor Mario Mirra busca pruebas para avalar las palabras de Vallejo, quien al declarar el martes afirmó que él había visto cómo Alberto "Beto" Juárez -el principal testigo en su contra-era quien en realidad encabezaba el grupo de hombres que terminó con la vida de los Brandán.
El Tribunal escucharía hoy los últimos testimonios (médicos que intervinieron en el caso) y los informes periciales. Luego se incorporarían las pruebas. Para escuchar los alegatos habría que esperar hasta el lunes y, luego de las últimas palabras de los acusados, llegará la sentencia de los jueces.