Descontrol en la fuerza

El ministro Claudio Maley, luego de haber pedido la aprehensión de un agente al que acusó de pedirle coima a un camionero fue clarito: “Este tipo de hechos van en contra de la ciudadanía que espera otra cosa por parte de los policías. Esto debe ser tomado como un claro mensaje: no vamos a tolerar este tipo de irregularidades”. Pero nadie lo escuchó. Desde ese día, la Justicia investiga dos causas de supuesta negligencia cometidas los uniformados y otras dos en las que efectivos están siendo investigados por robos.

Estos y otros hechos, como la detención de un comisario acusado de un robo de cables que utilizó vales de la repartición para cargar combustible al vehículo con el que habría cometido el ilícito, y la separación en el cargo del segundo jefe de la Dirección General de Drogas Peligrosas, hablan a las claras de un descontrol en la fuerza.

El personal no está respondiendo a los mandos naturales porque no encuentra freno a todas las irregularidades que están viendo cometer a varios de sus superiores. Tampoco hay un liderazgo fuerte y claro. Y mucho menos poder de reacción para luchar contra la inseguridad y los casos de corrupción que se conocen día tras día. Así será muy difícil que la sociedad vuelva a creer los hombres de la fuerza.

Caso 1: analizarán los celulares secuestrados

La fiscala Adriana Giannoni confirmó que los 12 celulares que encontraron en los calabozos de la ex Brigada de Investigaciones serán analizados por el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (Ecif). Ordenó allanar el arresto el viernes pasado porque descubrió que el detenido por un crimen que está alojado allí presionaba a un testigo clave del homicidio a través de mensajes que le enviaba de un teléfono móvil que tenía en su poder. Por otra parte, anunció que envió una copia de las actuaciones a la fiscala Mariana Rivadeneira para que investigue el delito de incumplimiento de los deberes de funcionarios público que piensa que podrían haber cometido los responsables de cuidar a los reclusos. Una vez que se analicen los aparatos, se sabrá si hubo otros delitos.

Caso 2: investigan el robo en un vehículo que estaba incautado

“Robo calificado” es el delito que se le imputó al policía que estaba de guardia cuando se produjo el robo de partes del motor de un utilitario que está secuestrado en la comisaría de La Reducción. El domingo, la propietaria de un Renault Kangoo se presentó en la dependencia porque un vecino le había comentado que un hombre estaba sustrayendo elementos de la camioneta. La víctima denunció el caso y se dio cuenta de que el policía de guardia llamaba a otra persona para contarle lo que estaba sucediendo y que le pedía que regresara con los objetos. El fiscal López Ávila dijo que el teléfono del agente fue secuestrado y que será analizado para determinar si esa llamada existió y, sobre todo, para saber quién es la persona con la que supuestamente se comunicó.

Caso 3: la Justicia no recibió un informe policial clave

El fiscal Diego López Ávila dijo que hasta ayer a la mañana la Justicia no recibió la causa de un robo en la que estarían involucrados dos policías. Una joven denunció que el viernes fue víctima de arrebato en la Esquina Norte.

Dijo que dos policías que circulaban en moto, al observar lo que había sucedido, persiguieron a los delincuentes y los detuvieron en la esquina de España y Juan B. Justo y le dijeron que lo llevarían a la seccional 11. La víctima fue hasta allí, pero le dijeron que no tenían novedades del caso. Luego se fue a otras dependencias (la 5 y la 10) y tampoco habían sido trasladados allí. Se sospecha que los supuestos policías nunca informaron la aprehensión de los motochorros y que se quedaron con el botín de los delincuentes.

Caso 4: Manzur dijo que castigarán los casos de corrupción

“A todos los que cometan algún tipo de delito, trabajen donde trabajen y sean quienes sean, les vamos a caer con todo el peso de la ley”, señaló el gobernador Juan Manzur sobre los supuestos casos de corrupción policial. “Cuando se compruebe que han cometido un delito, que venden droga y trabajen en el Estado, los voy a correr a todos. Los voy a exonerar para que nunca más trabajen -en el Estado- y no sólo eso, sino que los vamos a poner a disposición de la Justicia para que les caiga todo el peso de la ley”, agregó el mandatario. Manzur señaló además: “Vamos a seguir invirtiendo, incorporando y formando policías. Les daremos equipo para que los agentes puedan llevar adelante su tarea. En definitiva, para que la Policía cumpla con el rol que tiene que cumplir, que es cuidar a todas las familias tucumanas”.

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