28 Diciembre 2018
LA GACETA/FOTO DE INÉS QUINTEROS ORIO
El Gobierno otorgó a Buenos Aires International Airlines (BAIA) la concesión para explotar "servicios regulares internos e internacionales de transporte aéreo de pasajeros, carga y correo, con aeronaves de gran porte" en las 178 rutas, entre ellas la de Tucumán-Buenos Aires, que había solicitado en la Audiencia Pública del 6 de septiembre del 2017.
Así lo dispuso el Ministerio de Transporte de la Nación, a través de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), mediante la Resolución 1136/2018, publicado hoy en el Boletín Oficial.
La autorización comprende 22 rutas domésticas hacia 22 destinos desde Buenos Aires, 48 rutas latinoamericanas desde Buenos Aires, Córdoba y Rosario, y una larga serie de rutas poco convencionales que van desde Buenos Aires a Venecia o desde Buenos Aires a Papeete, por ejemplo.
De acuerdo a lo planteado por los representantes de la empresa en la Audiencia, el desarrollo del proyecto está a cargo de Seabury's Capital, consultora aeronáutica de alcance mundial con pie en Córdoba tras haber adquirido hace dos años la firma de soluciones tecnológicas para la industria, Volartec, vinculada a Christian Maggio, uno de los ex propietarios de Southern Winds.
BAIA apuntará directamente al turismo receptivo, teniendo como objetivo traer por año 1,5 millones de turistas al país uniendo de manera directa a diferentes centros urbanos del extranjero con puntos turísticos locales, mediante la operación de pocas frecuencias en cada red y no adoptará el modelo low cost.
Iniciaría sus operaciones con 11 aeronaves Boeing 737-800 (o eventualmente MAX 7, 8 o 9), que representarían una inversión de alrededor de US$ 136 millones, con la incorporación de 1.500 trabajadores.
La compañía había requerido la ruta Buenos Aires-San Miguel de Tucumán-Buenos Aires, con siete frecuencias semanales. En el detalle de la solicitud se especifica que las aeronaves que utilizarían son Boeing 737 o Airbus 320.
La norma deja constancia de las posiciones sustentadas por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) respecto a que "las condiciones actuales que presenta el sistema aéreo no resisten la incorporación de nuevas empresas y que la incorporación de nuevos transportadores afectará a la seguridad operacional, lo que podría derivar en el colapso del sistema en su conjunto".
También la posición de Aerolíneas Argentinas, que se refirió a las limitaciones que los acuerdos bilaterales vigentes imponen al otorgamiento de servicios en las rutas internacionales solicitadas y a los inconvenientes que presentan el suministro de combustible y la infraestructura aeroportuaria al ingreso de nuevos explotadores. (Télam)
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