Por Leo Noli
23 Diciembre 2018
La fachada de Villa Mitre no dice mucho, salvo por el enorme tinglado de 4.000 metros cuadrados que protege lo que sucede puertas adentro de un club que ha ido creciendo para bien, afirman en la zona. “Pero todavía nos falta, y mucho, eh”, aclara Daniel Díaz, el presidente del subcampeón de la Liga que junto al resto de la comisión directiva ha tomado una decisión importante: Villa Mitre desistirá de participar en el Torneo Regional Federal Amateur 2019, que organiza el Consejo Federal.
“No es viable, ni para nosotros ni para ningún club. Pero más allá de eso, creemos que es una decisión correcta. Los dirigentes no podemos hipotecar el futuro de la institución. Nos costó mucho trabajo hacer todo lo que venimos haciendo”, apela al razonamiento Díaz. En números, el presupuesto necesario para disputar el certamen que entrega un ascenso al Federal A asciende a casi $ 500.000. “Podemos llegar a reunir ese dinero, porque por suerte contamos con el apoyo del municipio de Tafí Viejo, pero todavía tenemos deudas que saldar y obras en curso. Sería injusto con los socios dejar todo de lado y enfocarnos en esa competencia”, repite Díaz, y vuelve al punto cero de su historia.
“Cuando asumimos en 2006, no teníamos nada. Ni socios. Hoy contamos con más de 600. Hicimos baños nuevos y un gimnasio; construimos una cancha de césped sintético en el club, otra de última generación de fútbol 7, al costado de la cancha. Estamos por iniciar la construcción de un salón de fiestas en el estadio, y mucho más. Villa Mitre cumple una función social, entonces el fútbol no es todo. Creemos que a partir de 2020 seremos capaces de contar con una institución autosustentable. Esto necesita tiempo y trabajo, no hay de alcanzar los objetivos que buscados”.
La función social es clave, porque si bien el fútbol lleva la bandera del éxito, hay otras disciplinas que se practican también en Villa Mitre. “Al ser los organizadores del Festival del Limón se convierte en nuestra mayor fuente de ingresos anual. También contamos con una escuela de Ballet estable que participa en otros festivales. Además, acá se juega desde voley a básquet. Nuestra política es ‘todo a su tiempo’. Amén de eso, pensar en el Federal significaría realizar remodelaciones puntuales y gastar dinero que hoy no tenemos”, agrega Díaz. Por ejemplo, hay que cambiar la tela olímpica en su totalidad, algo así como gastar $ 300.000. No hay vestuario visitante y se necesita uno. El local debe ampliarse.
UN LARGO CAMINO. Díaz, a cargo desde 2006, festeja las nuevas obras, pero asegura que faltan muchas más hasta 2020. la gaceta / foto de jose nuno
Uno de los mayores logros de Villa Mitre fue haber conseguido los fondos para la construcción de la cancha de hockey de césped sintético, ubicado en el predio Cota Villa Mitre, un terreno de tres hectáreas donado por la Cooperativa de la zona, ubicada en el barrio 10 de Noviembre. “Tenemos una cancha de fútbol que pensamos cercar, para que nuestras divisiones menores practiquen y jueguen acá. Están los vestuarios nuevos, y vamos a construir un quincho con todas las comodidades para nuestros socios”, comenta Díaz.
Villa Mitre apuesta a la inclusión. “Hay vecinos con hijos que viven cerca de nuestro predio que no disponen del dinero para pagar una cuota social, entonces nosotros cedemos profesores para que ellos también puedan soñar con un futuro mejor, en cualquiera de las disciplinas que tenemos. Eso es más importante que jugar un torneo de fútbol, ¿no? Ya habrá tiempo para eso”.
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