14 Julio 2018
Un vecino clama que la Municipalidad de San Miguel de Tucumán haga algo para terminar con el charco de agua que se forma desde hace tiempo. “El agua se junta desde hace mucho tiempo, y nadie soluciona el problema por más quejas que presentemos”, señala una vecina que vive en la zona. “Esto es avenida Salta casi San Juan; entre el tránsito enloquecedor y el charco que se forma, que crece un poco cada día que pasa, la avenida se hace más chica y las salpicaduras vuelan por todos lados y ensucian a todo el mundo”, protesta la lectora.
Cloaca trancada en Crisóstomo y Padilla
Un lector espera que la SAT o la Municipalidad se hagan cargo del problema y se presenten a solucionar el grave caso de contaminación que se genera en Crisóstomo Álvarez y Ernesto Padilla. “Como la cloaca está rebalsada, los líquidos brotan en la vereda y la calle, contaminando todo a su paso. Entre el mal olor y la aguas servidas se conforma un panorama lamentable y perjudicial para quienes habitamos en la zona”, se queja el vecino que envió la foto superior. “Ya nos quejamos varias veces, tanto al municipio capitalino como a la SAT, y a nadie le interesa la contaminación y el daño a la salud que estamos sufriendo adultos, niños y ancianos”, protesta.
Se pierde agua en Miguel Lillo y Ejército
“El agua potable falta en toda la ciudad, pero en mi barrio se la desperdicia y a las autoridades no les interesa”, señala la vecina que envió la foto superior que acompaña su comentario. Las críticas apuntan a la pérdida de agua potable que existe en Miguel Lillo al 300, desde hace varios meses, afirma la lectora. “La cañerías de agua no tienen la presión necesaria y, además, se pierde el líquido y las autoridades se hacen las desentendidas”, expresa, mientras reclama que la SAT envíe a sus operarios a reparar la rotura de la cañería.
Escape de agua potable en Concepción
“¿De dónde viene el agua que todo el día corre por la calle, contra el cordón de la vereda”, pregunta una vecina de Concepción. Las críticas hacen referencia a la pérdida que hay en las cercanías de Vicente López y Miguel Lillo, en la ciudad de Concepción. La lectora afirma que desde el año pasado vienen denunciado que existe la pérdida, y aclara que las autoridades municipales competentes no se hacen cargo del problema. Comenta que en la zona funciona una gomería, cuyo personal se pasa el día sacando agua con haraganes y no dan abasto. “Ya no se puede seguir desperdiciando agua potable; después en el verano nos lamentaremos cuando no haya agua ni para beber”, advierte.
Pintadas políticas en ruta a Tafí del Valle
A un año de las elecciones, los candidatos ya comienzan con el daño a la propiedad pública, que es un delito. La imagen es de la ruta a Tafí del Valle. “No quedó ni murallón ni piedra sin arruinar. Nuestra provincia no tiene futuro con este tipo de gente”, comenta la lectora. “Así no hay paisaje que se pueda cuidar, y mucho menos promocionar la belleza de nuestros cerros y paseos, cuando la gente ensucia todo lo que puede”, se queja.
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