Argentina le ganó a Argentina

ANDRÉS BURGO (DPA)

Si Argentina vive peleándose contra sí misma, también en este Mundial, con una Selección que se desgasta con conflictos internos, los hinchas abrieron un camino de reconciliación contra Nigeria en San Petersburgo. La energía positiva que bajó de las tribunas barrió con la crisis y esta vez no jugó Argentina contra Argentina, sino Argentina a favor de Argentina. Incluso en los peores momentos, cuando apenas cuatro minutos separaban a la selección de su mayor fracaso en los últimos 45 años, desde que no clasificó al Mundial de 1970, los hinchas no dejaron de alentar a sus jugadores y a Lionel Messi.

Si los argentinos hasta ahora miraban de reojo a esta Selección, haciéndoles sentir el peso de las tres finales perdidas en tres años y la desconfianza cubría a una generación de futbolistas a punto de despedirse del equipo nacional, algo cambió en Rusia. Pareció un pacto de convivencia hasta el final, como si el partido se jugara en el Monumental o La Bombonera. El “que de la mano de Lio Messi” se escuchó no menos de 10 veces.

Hubo tensión y algunos amagues de pelea entre argentinos en la tribuna, pero los nervios nunca se trasladaron a los jugadores. Cuando los empleados de la FIFA les pedían a los hinchas que por favor abandonaran el estadio, los jugadores de Argentina todavía no se habían ido del campo de juego. Levantaron sus manos varias veces, y se acercaron a uno de los arcos, para agradecer el aliento. Argentina no sólo le había ganado a Nigeria. También a Argentina.