Japón sorprendió a Colombia

Japón sorprendió a Colombia

NO GRAVITÓ. James Rodríguez maniobra ante la marca de Makoto Hasebe. reuters NO GRAVITÓ. James Rodríguez maniobra ante la marca de Makoto Hasebe. reuters
20 Junio 2018

ULLI BRÜNGER | DPA - ESPECIAL PARA LG MUNDIALISTA


La selección japonesa firmó una nueva sorpresa en este loco inicio del Mundial: venció con todo merecimiento por 2-1 a una Colombia inferior, que arrancó con muchas calamidades y jugó casi todo el partido en inferioridad numérica.

Publicidad

Kagawa adelantó a los asiáticos a los cinco minutos de penal, Juan Fernando Quintero igualó a los 39 y Osako anotó el tanto definitivo en un saque de esquina para plasmar la superioridad japonesa ante una Colombia que defraudó.

El desembarco del “Cafetero” en el Mundial no pudo ser más desafortunado y la primera noticia negativa para sus intereses llegó antes de comenzar el partido: su gran estrella, James Rodríguez, se quedaba fuera de la alineación titular por unas molestias físicas.

Publicidad

Pero peor aún fue su presentación en el propio encuentro, la peor posible. A los cinco minutos se encontró con un jugador menos y un gol en contra. Ocurrió en una cadena de errores que inició Davinson Sánchez, torpe en la persecución de un balón con Osako. Éste disparó, Ospina repelió, Kagawa lo intentó de nuevo y Carlos Sánchez impidió el tanto con la mano. Penal, expulsión y gol de Kagawa con una sobria ejecución.

El tanto y la expulsión reforzaron a los japoneses en su idea inicial de robar la pelota y llegar rápido al área rival. La defensa colombiana pasó un mal rato y José Pekerman decidió sacar del campo a Cuadrado a la media hora para intentar equilibrar el equipo con la presencia de Barrios.

Radamel Falcao, su única referencia arriba, lo intentó en un par de ocasiones y Colombia salvó la primera parte en un lance inusual. A los 39’, Falcao se inventó una falta y Quintero pidió el lanzamiento. Lo ejecutó con enorme picardía, por debajo de la barrera aprovechando el salto para marcar el 1-1.

El empate fue un gran estímulo para Colombia, que llegó al descanso con indisimulable sensación de alivio después de trepar por un partido que se le hizo muy cuesta arriba desde el mismo comienzo.

Sin embargo, Japón sí entendió tras el descanso qué debía hacer y pasó a jugar una impecable segunda parte. Quiso tener el balón y bajó notablemente sus revoluciones. Aplicó cabeza. A cambio, Colombia se fue empequeñeciendo y asumió impasiblemente su sometimiento.

Ospina salvó a los “cafeteros” con sendas intervenciones que anunciaron la zozobra que viviría su selección de ahí hasta el final. Ni siquiera la entrada de James Rodríguez a los 59 minutos contribuyó a mejorar la disposición colombiana.

Japón rentabilizó su dominio a los 74 minutos en un saque de esquina que encontró el impecable cabezazo de Osako ante la parálisis de la defensa rival. Otro gol, el tercero del partido, a balón parado, una constante en el inicio del Mundial.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios