Ruedas que son una religión

Ruedas que son una religión

Tucumán recibe “fieles” del Trasmontaña de mountain bike y del Transmontaña de enduro.

MILES Y MILES. Algunos de los competidores del último Trasmontaña se trasladan hasta uno de los circuitos oficiales.  la gaceta / foto de Antonio Ferroni MILES Y MILES. Algunos de los competidores del último Trasmontaña se trasladan hasta uno de los circuitos oficiales. la gaceta / foto de Antonio Ferroni
28 Enero 2018

Ni la redonda, ni la ovalada, ni siquiera hay una pelota. El evento deportivo que más gente atrae a Tucumán es el Trasmontaña de mountain bike, algo que se ha confirmado el año pasado. “Es el que mueve los mayores niveles de ocupación. Es importante para el turismo y la gastronomía”, reconoce Eduardo Viñuales, vicepresidente de la Cámara de Turismo de la Nación.

El Trasmontaña entrega entre tres y cuatro días de ocupación hotelera entre San Javier y Yerba Buena, y llegan casi 10.000 personas a la provincia entre participantes, técnicos y acompañantes. Siempre se realiza en agosto, aprovechando el feriado del 17.

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No sólo los números de participantes aumentan cada año, sino también el de seguidores que llegan a la provincia para seguir de cerca las competencias. “El deporte ha evolucionado. Todo está más profesionalizado y crece a un ritmo acelerado”, cuenta Pablo Rosales, miembro importante del mountain bike tucumano.

“Es un deporte en el que muchos comienzan siendo menores o juveniles y hoy ya son viejos competidores”, dice Rosales, que comenzó siendo cronometrista y ahora está dentro del grupo de organización. Esto lleva como resultado una “base muy familiar”, como lo llama, que indefectiblemente suma nuevos fanáticos y que los lleva a trasladarse en familia, en masa.

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“El desafío es vivir todo esto desde adentro, ser parte de estos eventos, no sólo que te lo cuenten”, finaliza Pablo.

En el caso particular del enduro, es un deporte que existe en todas partes del mundo, pero su estadía en nuestra provincia tiene algo especial. De hecho tiene su propio Transmontaña. “Es emblemático”, dice Mario Huespe, presidente del Club Tucumano de Enduro.

“El paisaje y la fisonomía del terreno que tiene nuestra provincia es algo que a todo el mundo le gusta. En el país no hay muchos lugares cómo Tucumán: la belleza que se recorre, la altura a la que se llega... los paisajes atraen mucho a la gente”, opina Huespe.

El año 2017 fue importante para la provincia en esta disciplina. Se hizo una apuesta fuerte con difusión mundial y recibió una respuesta favorable con la presencia de pilotos extranjeros. En total fueron 1.600. “Este año apostamos doblemente fuerte: mejorar lo que nos está faltando, corregir algunos errores... pero como este año tiene nuevos puntos de largada y llegada, creemos que va a ser un atractivo más para la gente. Incluso ya hay pilotos extranjeros confirmados para esta edición”, dice Mario.

El presidente del club de enduro cree que esto aún puede seguir creciendo: “Hay que inculcarle a la gente lo sano que es el deporte, y también el cuidado del medio ambiente. Hay que hacer que se conozca lo que tenemos en Tucumán.”

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