19 Diciembre 2017
BARCELONA.- A fuerza de repetirse, la fórmula más efectiva para frenar a Lionel Messi son los palos. Lo ocurrido en el duelo contra La Coruña casi tuvo más que ver con el esoterismo que con la probabilidad estadística del azar. “Leo” estrelló tres tiros en los palos y además erró un penal. Fue el único jugador de Barcelona que no se marchó dichoso con el 4-0.
Así lo reflejó su cara al termino del juego. Como también el hecho de que él tirara el penal y no se lo dejara a Luis Suárez para que su amigo completara un “hat-trick”. Messi decide quién patea los penales y quiso resarcirse de su mala fortuna, algo que no consiguió. Tenía una espina clavada y no pudo quitársela.
Los tres palos fueron una estadística exagerada de un hecho repetido. Messi lleva 14 tiros a los palos durante la actual temporada y sólo le quedan cuatro para igualar su récord de 18, logrado en la temporada 2011/12.
Messi ahora le apunta a Real Madrid. En el “derby” ansía cortar la racha de palos y volver a marcar goles. “Sería importante ganar por lo que significa enfrentar a Real Madrid en su campo. Ganando obtendríamos una ventaja importante. Si bien no son los segundos, sería una buena ventaja”, explicó el “crack” rosarino.
Real Madrid recibe el sábado a Barcelona y necesita una victoria sí o sí, a pesar de que el “Merengue” cerró el mejor año de su historia ganando el Mundial de clubes. El “Merengue” aún no encontró su mejor versión esta temporada y llega al clásico cuartos en la tabla, a 11 puntos de Barcelona, aunque con un partido menos. “Quedará mucha Liga por delante, pero sería lindo despedir el año con una victoria”, señaló Messi. (DPA-Especial)
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