El dilema “verdinegro”

Las similitudes son difíciles de soslayar: otra vez, en el curso de una segunda fase que Tucumán Rugby dominaba con suma comodidad y que lo impulsaba como gran favorito en la opinión pública, Universitario se le cruzó en el camino y lo sorprendió en su propia casa con una derrota que, si bien no lo movió de la primera posición, sí lo devolvió a la realidad: al Regional todavía le queda mucho por decir.

Por ahora, las semejanzas se limitan sólo al nudo de la historia “verdinegra” del año pasado. Resta ver si el desenlace también se repite, o Tucumán Rugby ha madurado lo suficiente como para impedir que un tropiezo arruine toda su campaña.

“Es pura coincidencia”, asegura Jerónimo Mesón. “El partido del sábado fue totalmente diferente al del año pasado. El equipo está bien. Sabíamos que esto podía pasar y estábamos trabajando para este momento, así que por ese lado estamos tranquilos”, agregó uno de los entrenadores del “Verdinegro”, que tiene un propósito de revancha luego de haber dejado escapar un título casi imposible el año pasado.

“Para mí, no afectó en nada. Son instancias en las que te podés equivocar, más adelante ya no”, coincide Martín Hernández. “La concentración fue clave. Nos desconectamos 10 minutos y perdimos. Estos rivales son así, tienen grandes jugadores a los que les das un centímetro de ventaja y te dan vuelta la historia”, analizó el pilar, que de todos modos confía en que su equipo aprendió de sus errores: “me parece que sí estamos más maduros que el año pasado”.

En Yerba Buena, están convencidos de que la historia no se repetirá. Ahora bien, si fue una casualidad o no, se verá frente a Los Tarcos, en un choque de altísima intensidad cuyo resultado puede sellar la clasificación directa del “Verdinegro” a las semifinales de los playoffs, o resquebrajar su confianza.

“Hay que salir rápido de esta derrota, y Tarcos es un lindo rival con el que medir para qué estamos”, opina Hernández.

“Será otra batalla y la jugaremos como tal. No creo que debamos demostrar nada. Vamos por buen camino. No fuimos los mejores y tampoco somos los peores ahora”, puntualizó Mesón.