Con la reglamentación de la Ley de Promoción Pecuaria aparecerían las inversiones ganaderas

Las cabañas ganaderas de capitales tucumanos “La Asunción”, que lidera Ignacio Colombres Garmendia, y “San Vicente”, con Juan Jorge Carbajal a la cabeza, realizaron, respectivamente, días pasados, sus XXXVII Remate Anual, en El Jardín (Salta) y XVII Remate en Trancas (Tucumán). Asistieron compradores de Tucumán, Salta, Santiago del Estero, Chaco y Corrientes, quienes se llevaron todos los ejemplares puestos en la pista.

Los precios fueron muy buenos, de acuerdo a los comentarios recogidas en los corrales y durante el desarrollo de las ventas.

En ambos casos, los cabañeros dueños de casa mostraron a los visitantes cómo trabajan puertas adentro, y por supuesto fueron libres las recorridas por los corrales habilitados para “ojear” los ejemplares y empezar a delinear la estrategia de oferta y compra que desplegarían, luego, durante el remate propiamente dicho.

LA GACETA Rural dialogó con ambos productores sobre la actualidad ganadera en sus establecimientos y en el NOA y las perspectivas que avizoran para el sector.

Durante esos diálogos abordamos temas como las inversiones en el sector; la Ley de Incentivo Pecuario, que fija el 0% para Ingresos Brutos; sobre si existe interés en volcar capitales al sector y sobre las perspectivas del engorde.

Colombres Garmendia

* Calidad: Durante el almuerzo, del que participaron unas 330 personas, los diálogos hacían referencia al optimismo de la gente respecto del futuro que tiene la ganadería. Ponderaron la calidad y el estado de los toros, que se reflejó en los precios pagados. Nosotros vendimos a 120 días, sin interés.

* Proyección: Se compraron tanto toros como vaquillonas porque es gente que apuesta a la ganadería. Es que avizoran un futuro promisorio por creció la demanda mundial de carne y, por sobre todo, porque la Argentina volvió al mercado de China.

Además, en el sector se percibe una mayor retención de vientres, que significa que estamos ante una época de crecimiento del stock ganadero (porque más vientres son más terneras y terneros).

* Ley Pecuaria de Tucumán: Lamentablemente la norma aún no está Reglamentada. Se trata, sin dudas, de una buena iniciativa, que muy bien podrían imitar las demás provincias del Noroeste Argentino (NOA). Puede ser un incentivo por demás interesante para la actividad.

* Engorde: El gran incentivo para desarrollar la ganadería en el NOA es utilizar el maíz producido y sin tener que pagar el flete hasta el puerto. Si por el maíz vendido en Tucumán nos pagan $ 1.500 por tonelada, y por el flete nos cobran $ 900, entonces al ganadero no le conviene vender ese grano; a ecuación no le conviene. Entonces, prefiere usarlo para engordar los animales en sus corrales. Eso es “agregarle valor” al maíz, lo que favorece, sin dudas, a los engordes en el NOA.

Por el ternero pagan $ 42/kg vivo, y por el novillo $ 38/kg vivo. Es una diferencia que no le favorece al ganadero; entonces, teniendo el maíz se compensa esa diferencia de precio.

* Inversiones: Se perciben mejoras en los rodeos ganaderos del NOA; esto es muy importante en cuanto a la calidad, lo que implica una mayor eficiencia productiva en los engordes por la calidad de los animales.

Carbajal   

* Expectativas: Los ganaderos que pasaron por nuestro remate estaban muy contentos, con una “onda positiva” por la ganadería. Existe confianza de que los viejos ganaderos invertirán más, y también está apareciendo nuestros ganaderos listos para entrar en el negocio.

* Inversiones: Mientras no se reglamente la Ley Pecuaria de Tucumán (lleva un mes de sancionada) no sabemos si las inversiones crecerán, o si serán lentas. Con la puesta en marcha de esa ley veremos quiénes tienen ganas de invertir y crecer.

* Engorde: El crecimiento de los engordes pasa por esta Ley Pecuaria. Todos están muy entusiasmados por esta propuesta, pero esperan que la ley se reglamente en el más corto plazo.

* El maíz: Los engordes del NOA deben aprovechar el maíz, agregándole valor a la ganadería. Por que el gran problema es el alto costo para llevar el grano al puerto.