Descubrí por qué no podés parar de cantar "Despacito", la canción del momento

Descubrí por qué no podés parar de cantar "Despacito", la canción del momento

AL CEREBRO. La canción de Luis Fonsi provoca gusanos auditivos. CAPTURA DE VIDEO AL CEREBRO. La canción de Luis Fonsi provoca "gusanos auditivos". CAPTURA DE VIDEO

Consultamos con los expertos, quiénes sí tienen una explicación para el fenómeno.

14 Mayo 2017
​“La Felicidad” y “despeinada” (Palito Ortega). “Macarena” (Los del Río). “Waka Waka” (Shakira). “Gangnam Style” (Psy). “We will rock you” (Queen). A la lista de las canciones más pegadizas de todos los tiempos se ha sumado “Despacito” (Luis Fonsi- Daddy Yankee). Fue el hit del verano. Y sigue sonando donde vayamos. Sale de los parlantes, se escucha de la boca de la gente en la calle... A esta altura seguramente ya aprendiste a cantar “pasito a pasito, suave suavecito”. No fue tu intención memorizar la letra. Pero está ahí en tu cabeza. La tararean en acá, en EE.UU., en Europa, ¡hasta en China! Superó las 1.000 millones de reproducciones en YouTube ¿Qué tiene esta canción? “No sé por qué pegó tanto”, declara su autor. Consultamos con los expertos, quiénes sí tienen una explicación para el fenómeno. 

> Música

La pieza que tiene todos los elementos para ser un hit

Nadie puede afirmar que la canción “Despacito” haya sido “diseñada” para convertirse sí o sí en un hit, pero según el análisis que hace de ella un músico tucumano, el tema tiene todo lo necesario para serlo: una melodía simple, variación en los tiempos, una mezcla de estilos (comienza con una especie de cumbia, luego pasa al reggaeton y el rap) y una curiosidad: en el momento pico del tema, la voz aguda de Luis Fonsi.

“Lo más pegadizo de una canción es siempre la melodía mucho más que la letra, que es un complemento. Y las melodías simples, como en el caso de este tema, son mucho más fáciles de recordar. Si la analizamos, no tiene más de cinco acordes la canción, es algo muy simple, acompañada desde un correcto planteamiento desde las palabras, que se corresponden perfectamente con el espacio que hay en la canción”, detalla el músico Johnny Szpekman.

Pero nada sería de todo ese mix de melodía y música sin la repetición, tanto dentro de la misma pieza (la cantidad de veces que repite la palabra “despacito”) como la que hay “afuera”: en este caso, es la industria la encargada de que la canción sea pasada varias veces por las radios, la televisión y en todos los medios posibles. “La repetición constante de una melodía construída con una relación interválica armoniosa es lo que termina haciendo que se te grabe en la cabeza”, explica Szpekman.

Pero hay más: “por algún motivo, a las mujeres les gusta cuando un hombre canta agudo. Y en la parte más intensa del estribillo está Fonsi cantando allá arriba, bien alto; es otra de las cosas que llama la atención, porque tiene como un in crescendo natural”, desgrana el rockero, que se tomó el tiempo de escuchar la canción del momento para analizarla.

“Despacito” empieza con ritmo similar al de una cumbia y recién en el minuto 1:25 larga con el reggaeton. Y, cuando interviene Daddy Yankee, se convierte en un rap para luego volver al reggaeton. Esta variedad de estilos, pero principalmente de tempos, también la hacen atractiva. “Entre el verso y el estribillo hay una variación de las células rítmicas. Fonsi empieza con figuras rítmicas mucho más cortas y después cambia en el estribillo; eso hace que la canción sea más fácil de reconocer y que psicológicamente sea más agradable”.

>  1.400  millones de reproducciones suma el video oficial en YouTube desde que fue subido, el 12 de enero. Eso equivale a 11 millones de reproducciones diarias.

> Jingleros

Objetivo primordial: pegarse y vender

“Despacito” se pega muy rápido porque es un producto perfecto de laboratorio. En eso coinciden quienes saben más que nadie cómo se diseña la melodía ideal para vender: los jingleros. “Nada de arte ni de poesía. Este tipo de canciones tienen una intención expresa de los creadores: que se pegue. Es mercadotecnia pura. Los hits de hoy están diseñados y pensados para vender”, sostiene Gonzalo Sánchez, autor de exitosos jingles de nuestro medio. Según Sánchez, las letras repetitivas son claves para instalarse en la memoria de las personas. Aunque nadie tiene la fórmula perfecta, sostiene, porque la línea que divide lo pegadizo de lo hartante es muy delgada. 

Diego Viruel, humorista y jinglero, sostuvo que lo primera que se pega de una canción es la melodía. “Debe ser muy repetitiva para que se alcance el máximo potencial”, destaca. Si tiene pocos acordes y muchas notas, la melodía más pegadiza será.

> Neurociencia

Cómo actúan los “gusanos auditivos”

Pedro Beckinchstein, doctor en Biología, investigador en neurociencias y divulgador científico, explicó recientemente en el programa “Todo tiene un porqué” (TV Pública) sobre el mecanismo de las canciones para hacerse pegadizas. “Lo que hacen estos ‘gusanos auditivos’ es hackear los sistemas de memoria a corto plazo, logrando que la melodía se instale”, señaló. Aquello que entra en este tipo de memoria, en general cosas simples de la vida cotidiana, tiene la particularidad de vaciarse rápidamente para dejarle lugar a otras cosas. Lo que hacen estos “gusanos” es instalarse y esquivar la operación del cerebro para vaciar la memoria, por lo cual quedan instalados como un parásito.

> Neurólogo

¿Qué pasa en tu cerebro cuando escuchás una melodía pegadiza?

Te levantás y enseguida empieza a sonar en tu cabeza. Estás trabajando e inconscientemente tarareás “Despacito”. Aunque lo intentás una y otra vez, ¿no conseguís borrar la canción de tu mente? No te preocupés, no estás solo en la “desgracia”. De cada 100 personas, 99 son susceptibles al síndrome de la canción pegadiza (earmworm o “gusano del oído” en inglés), que implica que al escuchar ciertas melodías estas resuenan una y otra vez en la cabeza de manera incontrolada.

¿Qué sucede en nuestro cerebro? le preguntamos al neurólogo Alvaro Campero. “El síndrome de la canción pegadiza es la incapacidad de desalojar una canción y evitar que se repita en la cabeza. Se realizaron varios estudios que indicarían que este fenómeno se localiza en un área del cerebro relacionada con la memoria a corto plazo”, explica. 

Pero claro que no todas las canciones parecen tener las propiedades que desencadenan esta reacción en el cerebro, apunta Campero. Y remite a un estudio de James Kellaris, de la Universidad de Cincinnati (EEUU). Él probó que el “gusano del oído” se produce cuando la música es simple y repetitiva. Es más pegadiza si es lo primero que escuchás a la mañana, o lo último que escuchaste a la noche. La necesidad de tararear esas canciones funciona como una especie de “picor mental”, según Kellaris, que sólo se alivia repitiendo una y otra vez la melodía. El efecto puede durar horas o días. La fórmula para despegarla, entonces, es: cantarla muchas veces o reemplazarla por otra igualmente pegadiza. Otra opción es escuchar la canción en cuestión completa y aprenderse la letra.

> En las canchas

Para santos y decanos, “Despacito” es la nueva melodía para alentar al equipo

“Ciuuudaadela, hizo debutar tu cancha en primera, copó el gallinero y la bombonera, yo te lo recuerdo para que te duela”, canta la hinchada de San Martín. Atlético contesta: “daaale Dee, pongamos huevo que tenemos que ganar que la inimitable te viene a alentar,

vos sos mi locura vos sos sentimiento...” Todos quieren tener su propia versión de “Despacito”. Todos los cantantes (hasta Justin Bieber), pero también las barras de los equipos de fútbol. Para un hit esa es la gloria: cuando una hinchada adopta su melodía y le cambia la letra para alentar a su equipo.

La canción de Luis Fonsi ha dado vueltas por todos los estadios de fúltbol. Basta con escribir “parodias de Despacito” en Google para encontrar decenas de versiones. La usan para relatar partidos y hasta para cantar goles. También para hacer campañas de salud.  Pareciera que cualquier cosa que nos pase en la realidad entra en los estribillos de la canción.

en tucumán 
el hit del momento sonará en agosto 
La página oficial de Luis Fonsi informa que el 28 de agosto es la fecha elegida para su concierto en Tucumán. Algunos productores locales informaron que están en tratativas aún, por lo que todavía no se sabe en qué estadio se presentará. Pero es un hecho que el hit “Despacito” sonará en el “Jardín de la República”.
 
1.400 
 
millones de reproducciones suma el video oficial en YouTube desde que fue subido, el 12 de enero. Eso equivale a 11 millones de reproducciones diarias.
>En Tucumán
 
El hit del momento sonará en agosto
 
La página oficial de Luis Fonsi informa que el 28 de agosto es la fecha elegida para su concierto en Tucumán. Algunos productores locales informaron que están en tratativas aún, por lo que todavía no se sabe en qué estadio se presentará. Pero es un hecho que el hit “Despacito” sonará en el “Jardín de la República”.


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