Los 60 policías que se acostumbraron a vivir con la tensión a flor de piel

Rescatan a víctimas de inundaciones o heridos en alta montaña, negocian en las tomas de rehenes e intervienen en operativos Es el equipo de élite de la Policía, está compuesto por expertos que intervienen en procedimientos de riesgo

ALERTA CONSTANTE. Los integrantes del Cuerpo Especial de Rescate y Operaciones tienen intervenciones diarias y colaboran con otras unidades. la gaceta / fotos de Jorge Olmos Sgrosso ALERTA CONSTANTE. Los integrantes del Cuerpo Especial de Rescate y Operaciones tienen intervenciones diarias y colaboran con otras unidades. la gaceta / fotos de Jorge Olmos Sgrosso
01 Abril 2017

La adrenalina se respira en el ambiente. La certeza de que en cualquier momento van a entrar en acción y la tensión de una alerta inminente se siente en la base central del Cuerpo Especial de Rescate y Operaciones de la Policía, el grupo Cero. Cada año alrededor de 50 aspirantes luchan para ingresar, pero son pocos los que lo consiguen.

En pocos minutos se colocan el uniforme táctico. Saben qué prendas deben ponerse en el acto y cuáles en el camino. Están equipados con armas de avanzada y tienen como referentes a los equipos Swat de Estados Unidos y Bope ( Batallón de Operaciones Policiales Especiales) de Brasil. En un suspiro, suben a la camioneta y parten a cumplir la misión. Así entrenan los profesionales del grupo. Están preparados en tiro, rescate, artes marciales y negociación. “Necesitamos hombres entrenados”, explica el jefe del grupo, el comisario principal Claudio Dadín.

Para lograrlo, su equipo sigue una estricta rutina. Todos los días corren 7 kilómetros y una vez al mes corren 20. También hacen ejercicios funcionales y pesas. “El Cero hoy tiene intervenciones diarias y están altamente entrenados. Cuentan con los fusiles de asalto más modernos de América Latina. Constantemente se adquieren herramientas y nuevas tecnologías que les permiten llegar a un nivel de especialización y reconocimiento internacional. Hoy el grupo Cero ya dicta especializaciones para varias policías de América Latina”, explicó el secretario de Seguridad Paul Hofer sobre el equipo especial de la Policía.

“Es una unidad de reserva fundada a mediados de los ‘80 que actualmente está compuesta por 60 efectivos especializados en diferentes tareas y que intervienen cuando la policía convencional se ve superada o sobrepasada por situaciones críticas. La capacitación constante es uno de sus requisitos. Además estamos bien equipados, algo que es fundamental”, explica el comisario Dadín.

Cada intervención del grupo se registra con una cámara GoPro que lleva en su casco uno de los uniformados. Esas imágenes sirven como registro de la legalidad del procedimiento. Pero también para que los miembros del CERO observen y analicen los videos para mejorar.

“Hay que estar preparados porque el escenario no es siempre el mismo”, señaló Dadín.

El grupo, que inicialmente intervenía en casos de rescate de personas extraviadas, ahora presta apoyo a otras áreas de la Policía, como la División Homicidios y Delitos Complejos; Departamento Operaciones Policiales; Policía Lacustre y Dirección General de Drogas Peligrosas.

Para entrenar, además de utilizar el polígono virtual, Los 60 integrantes realizan prácticas con el Simulation, que consta de un cañón que se adapta a una pistola calibre 9 milímetros y las municiones (Mun FX) que no son letales pero impactan con fuerza y dejan una gran marca en el cuerpo que luego se convierte en un hematoma. Este material también se utiliza en los entrenamientos para practicar tácticas de lucha cuerpo a cuerpo.

Sobre las nuevas técnicas de entrenamiento para el grupo de elite de la fuerza, Hofer agregó: “Submunitione es una munición que permite el acercamiento, es especial para que el cuerpo de elite de la Policía vaya afianzando y adquiriendo nuevas aptitudes durante su proceso de entrenamiento permanente”.

“Uno de los momentos más arriesgados es ingresar a una vivienda”, advirtió el comisario Claudio Dadín en la charla que mantuvo con LA GACETA.

- ¿Qué tiene de especial ese momento?

- Es un trabajo que requiere mucho cuidado y en el que se debe tener todo tipo de herramientas para entrar, sí o sí. A veces hay que atravesar puertas y rejas, para eso utilizamos pinzas de corte, barretas y un ariete. Somos conscientes de que la Justicia confía en nuestra eficacia. Una vez adentro, cada uno tiene una misión específica, para avanzar hasta que se cumple la medida.

- ¿Cuál es una situación crítica?

- Hay varias. Por ejemplo, cuando hay toma de rehenes; o cuando alguien comete un delito y escapa de la Policía. También hay casos en que los agresores amenazan con matar a alguien o quitarse la vida.

- ¿Cómo se actúa en ese caso? - Ahí intervienen los negociadores. Es la persona que se interioriza de la situación. Tratamos que ellos resuelvan las situaciones y el grupo ingresa sólo si es necesario.

- ¿Y si se encuentran con una persona armada y fuera de control?

- Es un gran problema encontrarse con alguien que está atrincherado, armado y fuera de sí. Hay que perimetrar la zona y sacar a la gente para preservarla, aunque a veces se enojen. Por curiosidad pueden morir. Necesitamos que la sociedad nos ayude para que todo termine sin víctimas, que es lo más importante.

Sargento Sebastián Ledesma “Es especial ser del Cero, se lleva en el corazón. Tenés que tener la ambición de prepararte constantemente y estar todo el tiempo concentrado en tu trabajo. Es una responsabilidad enorme, pero también es un orgullo. Siempre hay que tratar que el riesgo sea el mínimo”, aclara y agrega: “llegar aquí tiene que ver con la capacitación”. Ledesma es maestro de artes marciales e instructor en defensa personal.

Oficial principal Cristian González “Son pocos los que pueden permanecer en una unidad como la nuestra. Hay que resolver situaciones en que hay gente en peligro. Vamos a dónde nos necesita la gente. A zonas inhóspitas donde hay personas heridas. Actuamos en rescates en zonas anegadas y también en el cerro. Estamos preparados porque practicamos”, explica. González es el encargado de planificar las operaciones de alto riesgo.

Cabo primero Juan José Rojas ”Arriba siempre puede haber sorpresas. Hay que estar preparados. Nosotros vamos a instalar torres para entrenarnos”, cuenta Rojas, quien es rescatista y se especializa en ascensos a edificios.

Oficial principal Pablo Antonio Coronel ”Hay que saber cómo usar la fuerza sin causar daño a otros, la respuesta debe ser siempre proporcional al ataque recibido, nunca hay que sobrepasarse y se debe tener un gran autocontrol”, destaca Coronel, quien es abogado y aporta sus conocimientos legales para asesorar al grupo.

Sargento Máximo Chamorro ”Para formar parte del grupo Cero hay que tener mucha vocación, fuerza de voluntad y temple para sobreponerse a situaciones que ponen al límite la resistencia mental y física”, asegura Chamorro, quien es experto en rescates en inundaciones y nadadaro de aguas abiertas.

simulador de tiro          durante un mes, efectivos de diferentes unidades practicaron en un polígono virtual
El secretario de Seguridad Paul Hofer supervisó el cierre de la capacitación en el simulador de tiro para personal policial. “Durante un mes contamos con este sistema que viene a potenciar las tareas que se realizan en el polígono real. Permite corregir errores al actuar sobre una plataforma absolutamente segura y con armas electrónicamente modificadas”, Hofer. Cada practicante pudo hacer 60 disparos con pistolas y escopetas. Participaron 2016 efectivos de diferentes unidades policiales, como las regionales Capital y Este,  que cubren algunos de los barrios más conflictivos de la provincia. “Se trata de una herramienta virtual que permiten interactuar. Pero también sirvió para hacerlos practicar con sus propias armas”, precisó el comisario José Díaz, director de Institutos Policiales. 

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Simulador de tiro        

Durante un mes, efectivos de diferentes unidades practicaron en un polígono virtual

El secretario de Seguridad Paul Hofer supervisó el cierre de la capacitación en el simulador de tiro para personal policial. “Durante un mes contamos con este sistema que viene a potenciar las tareas que se realizan en el polígono real. Permite corregir errores al actuar sobre una plataforma absolutamente segura y con armas electrónicamente modificadas”, Hofer. Cada practicante pudo hacer 60 disparos con pistolas y escopetas. Participaron 2016 efectivos de diferentes unidades policiales, como las regionales Capital y Este,  que cubren algunos de los barrios más conflictivos de la provincia. “Se trata de una herramienta virtual que permiten interactuar. Pero también sirvió para hacerlos practicar con sus propias armas”, precisó el comisario José Díaz, director de Institutos Policiales. 

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