No puede responder al primer intento ni al segundo. Está manejando desde Córdoba capital a Carlos Paz en medio de una tormenta, y no quiere violar ninguna regla de tránsito. No sea cosa que la Policía lo detenga y justo él, el Oficial Gordillo aunque vestido de civil como el humorista Miguel Martín, termine multado o detenido.
La tercera es la vencida y, ya en destino, Martín atiende ayer por la tarde a LA GACETA (mientras Gordillo está de guardia imaginaria en algún lado desconocido), todavía disfrutando haber ganado el premio Vos. La estatuilla la entrega el diario cordobés La Voz del Interior, y la ganó por mejor unipersonal de la temporada de verano en la principal plaza turística de la provincia mediterránea.
No estuvo tranquilo en la ceremonia del lunes por la noche: el año pasado ya había estado nominado a esta misma categoría pero perdió con Julián Labruna, con el que volvía a competir ahora. “Es un premio muy importante en Córdoba. Me estoy empezando a tranquilizar porque es un lindo incentivo para quienes la venimos remando desde hace tanto tiempo, me da aire. Si no ganaba ahora, era para no volver más”, afirma. Pudo hacer doblete, pero Camilo y Nardo lo vencieron en la categoría a mejor humorista.
“La verdad es que estoy con un show con muy buena producción, con videos y escenografía que coinciden con la idea del espectáculo, y fueron hechos especialmente. Los primeros frutos de lo presentado es que el boca a boca entre el público funcione adecuadamente, que le guste a la prensa y que la gente vaya y se pague una entrada en una temporada que está bastante dura. A mí me va bastante bien; lo mío es matemático: puedo darle de comer a mis hijos, calmar a mi esposa Soraya y vestirme”, enumera.
El Oficial Gordillo tiene cuatro funciones por semana (dos el martes) en el teatro Libertad, con capacidad para 450 personas, con tres cuartas partes de las butacas ocupadas de promedio. “Es un año raro: hay poca gente y se llena el teatro o hay mucha gente y no va nadie. En mi caso, noté un incremento de público, pero está complicado para las otras obras. No lleno todas las noches, pero en ninguna se escucha el eco de cuando la sala está vacía”, se sincera.
El cómico estará todo el mes en cartel y se tomará un mes de descanso en marzo. En abril volverá a presentar “Delincuente del humor” en Tucumán, antes de salir de gira por la región. “La gente sigue prendida con mis historias familiares y voy a tener que inventarme otra infancia para seguir -ríe-. Pruebo cosas nuevas constantemente para medir la reacción del público, y lo que mostré en diciembre en el estreno que tuve en el teatro Alberdi es distinto de lo que hago ahora, que tiene muchos cambios y sorpresas”.
El Vos está a la altura de los premios Carlos que otorga el municipio turístico y que esta noche anunciará a los nominados. Martín espera figurar en alguna categoría (“espero aparecer en más de una; el año pasado me postularon en dos y quedé afuera en ambas”, recuerda) y participar de la ceremonia el lunes. Quizás vuelva a Tucumán con más de una estatuilla. Y con su mujer contenta.