Adiós al inolvidable modernista del tango

BUENOS AIRES.- El músico y director de orquesta Horacio Salgán, referente y vanguardia del tango, creador del Quinteto Real y de piezas maestras como “A fuego lento”, falleció ayer a los 100 años.

Salgán permanecía internado en el Sanatorio Güemes y sus restos serán inhumados hoy en el panteón que posee Sadaic en el cementerio de Chacarita.

El pianista, director de orquesta y compositor fue uno de los máximos exponentes del tango y además de “A fuego lento” fue autor de composiciones emblemáticas como “Don Agustín Bardi”.

Salgán recibió distintos homenajes tras cumplir el 15 de junio 100 años, con reconocimientos y conciertos realizados por colegas de la talla de Daniel Barenboim.

En 1950 el autor de “Grillito” y “La llamo silbando” grabó con Astor Piazzolla, quien fue uno de los máximos exponentes del tango de vanguardia, registro que se publicó bajo el título “Para fanáticos solamente”. Luego formó un dúo legendario con el guitarrista Ubaldo de Lío y el Quinteto Real.
 
Una vida llena de música

Salgán, quien nació el 15 de junio de 1916 en el barrio del Abasto; con su orquesta, el dúo con De Lío o al frente del Quinteto Real dedicó su vida a la música. Sus estudios de piano los inició a los 6 años y a los 14 era pianista de películas mudas en un cine barrial y organista en la Iglesia San Antonio, de Villa Devoto.

Asimismo, se incorporó en la primera parte de su carrera a distintas formaciones que tocaban en radios Excelsior, Prieto y Stentor, entre otras emisoras.

Pero fue cuando escribió arreglos para la orquesta típica de Miguel Caló que comenzó su etapa como compositor, hasta que ingresó a la formación de Roberto Firpo, donde comenzó a diseñar la que sería su propia orquesta típica, que creó en 1944.

Salgán como creador y en la dirección de su orquesta impulsó la carrera de cantores de la talla de Edmundo Rivero y Roberto Goyeneche. El músico creó en los 60 el Quinteto Real, formación que lo tuvo en piano, dirección y arreglos, junto a De Lío en guitarra, Enrique Francini en violín, Rafael Ferro en contrabajo y Pedro Laurenz en bandoneón.

En sus distintas formaciones al Quinteto Real lo integraron también músicos como Antonio Agri en violín y Leopoldo Federico en bandoneón. Entre las actuaciones de Salgán se destacan las realizadas en 1970 en el Lincoln Center de Nueva York.

En Tucumán actuó una sola vez. Fue en el Teatro San Martín, para el Septiembre Musical de 1968. En esa oportunidad se presentó junto al Quinteto Real.

El pianista se retiró oficialmente de la actividad en 2010 en los festejos del Bicentenario.

En cine, en 1998 participó del filme “Tango, no me dejes nunca”, nominado al Oscar a la mejor película extranjera; tocó con su orquesta en la película documental “Café de los maestros” en 2008, dirigido por Miguel Kohan; y fue el protagonista del filme documental “Salgán & Salgán”, de Caroline Neal.

En 2005 recibió el Premio Konex de Brillante.

EJEMPLO
“Siempre hizo una música especial, muy de avanzada”
Según el guitarrista Miguelito Ruiz, Horacio Salgán fue un prócer del tango. Un artista de esos que pocas veces aparecen. “No sólo por su talento musical, sino también por su calidad como persona”, señaló. Y cuenta que tuvo oportunidad de conocerlo en Buenos Aires, en un local llamado La Tribu, perteneciente a los hermanos Farías Gómez. “Allí actué varias veces y en ese mismo escenario también solía tocar Salgán. Conocerlo fue un privilegio. No tuve la dicha de actuar con él, pero sí de compartir varias veladas. Era una persona muy correcta, un ejemplo de lo que debe ser un buen artista”, señaló.

 SONORIDAD
“hizo un tango de alto vuelo; con  una increíble sonoridad”
El guitarrista Carlos Podazza se reconoce un fanático de Horacio Salgán. “Provocó una verdadera revolución en el tango. Era extremadamente creativo y, hasta último momento militó en la vanguardia”, señaló. Es precisamente por esas creaciones vanguardistas que será recordado. “Yo no lo conocí, pero mi padre sí. Y, por esa razón, yo crecí escuchando sus temas”, agrega. Respecto de su aporte a la música popular dijo que el dúo que formó con De Lío es de lo más revolucionario que se hizo. “Hasta no hace mucho estuvo deleitándonos cuando actuaba con su hijo”, dijo.