En 1906, el senador nacional por Tucumán, doctor Alberto León de Soldati, presentó al Congreso un proyecto de ley que destinaba 125.000 pesos para la "expropiación y saneamiento" de los terrenos al naciente de la ciudad que se destinaron a la formación del parque 9 de Julio. Estaban limitados "al oeste, por una línea paralela al boulevard Avellaneda y a 230 metros del mismo; al este, por una línea paralela a la anterior y situada a 1.400 metros de esta; al norte, la prolongación del boulevard Sarmiento; y al sur, la del boulevard Roca". Los fondos de la iniciativa (convertida en la ley 5038) se aumentaron mediante otras leyes nacionales, que también proyectó y defendió Soldati, y que se sancionaron en 1907, 1908 y 1910.
Interesa revisar los antecedentes que el médico y senador invocaba en su discurso ante el Senado para esta obra cuyo propósito fundamental era higiénico. Recordaba que en 1897, siendo ministro de Hacienda de Tucumán, proyectó algo similar; la Legislatura lo convirtió en ley, pero no se concretó por falta de recursos. Reiteró la idea años después, cuando presidía el Consejo Especial de Higiene, formado con motivo de la amenaza de peste bubónica. El Consejo lo aprobó unánimemente y lo recomendó al gobierno. Pero "fue nuevamente abandonado porque había pasado el peligro, y porque la previsión no es virtud característica de los individuos, ni de los pueblos, y mucho menos de los gobiernos".
Cuando Soldati representó a Tucumán en el Congreso Nacional de Médicos sobre el paludismo, por tercera vez fue estudiado y recomendado el proyecto. La comisión de profilaxis, que integraban los doctores José H. Tedín, Gerónimo del Barco, Leonidas Carreño y Juan Carlos Delfino, subrayó que la "zona baja y anegadiza que antes formaba el lecho del río Salí", era el "foco de formas perniciosas de paludismo", y que podía neutralizarlas la propuesta de Soldati. Ella consistía en desecar el área "por medio del drenaje profundo, utilizando el canto rodado del mismo Salí, y plantando ordenadamente árboles de los menos aptos para guarecimiento de los mosquitos y que, por la amplitud de sus ramas y hojas, favorezcan mayormente la evaporación del agua que absorban del suelo".