“Cuando canto siento que sale de mí, en forma de sonido, toda la información que llevo adentro, desde cada célula, más allá de lo que esté diciendo o de lo que esté cantando. Y esa sensación es muy placentera”. La descripción de Guadalupe Hidalgo Gil irradia ganas de aprender a cantar.
La cantante y docente se apresta a dictar, desde esta semana, un curso de tres meses en el Instituto de Música de la Universidad Nacional de Tucumán.
Hidalgo Gil emplea el Método Rabine o Método funcional de la voz, que busca volver a los comienzos en la vida de la persona en cuanto a la forma de respirar y a los aspectos funcionales orgánicos del sistema fonador.
“Lo primero que les pregunto a mis alumnos es si apuntan a un hobby o a presentarse en un escenario, para enfocar la enseñanza”, informa.
- ¿Qué aporta el Método Rabine?
- Empecé a estudiar canto con técnicas que sentía como no naturales. Cuando empecé a estudiar este método en Buenos Aires desde la primera clase me sentí muy bien y eso lo veo en mis alumnos, con resultados inmediatos, porque no se trata de hacer sino de deshacer trabas, bloqueos y mañas de tensiones. Igual las otras técnicas van evoluciondo.
- ¿La técnica se aplica sólo para canto popular?
- No. De hecho Eugenie Rabine es cantante lírico alemán de origen americano. Por su contextura o por un problema en la garganta le dijeron que no podría cantar, y buscó la manera de hacerlo. Comenzó a asesorarse con especialistas y a trabajar con el cuerpo. Da clases en todo el mundo, cada tanto viene a Argentina, y Renata Parrussel es su discípula.
- ¿Y quiénes pueden aprender?
- Personas de toda edad.
- ¿Qué pasa si alguien tiene problemas de desafinación o de ritmo?
- Esos son problemas cerebrales: si es falta de coordinación o si la información llega cruzada al oído se pueden tratar, porque la entonación es un entrenamiento muscular con el oído y con la garganta.
- ¿Si asiste a tu curso un cantante que tiene técnica académica deberá olvidarse de la impostación?
- No, al contrario, todo suma. El conocimiento que se trae sirve para distintos usos estéticos. Lo que hace mi taller es proveer una nueva opción de sonido, a la cual, si les gusta, la pueden usar, y si no les gusta, la descartan. De hecho, yo uso Rabine para lírico también: cuando canté en el coro Música Quántica vocalizaba con el método y lograba un potencial tremendo. Llegaba al ensayo con el reconocimiento del instrumento desde otro aspecto y al llegar vocalizaba como pedía el director, pero ya llevaba la voz preparada.
Hidalgo Gil ya no integra el prestigioso coro porteño porque se encuentra abocada a concluir su carrera académica y a consolidar su carrera solista. Además de la docencia y de sus trabajos como sesionista, articula con consolidar sus proyectos musicales: el dúo que integra con el guitarrista Guillermo Martel y el sexteto vocal femenino La Papa Cantora, junto a Guadalupe García Dupouy, Ingrid Bocek, Magdalena Fernández Paz, Maia Prieto y Naya Ledesma.
La cantante tucumana explora nuevas sonoridades, entre temas de grandes autores y propios, pero prefiere no definirse en cuanto a género: “hay tanta música bella para cantar... Lo que sí me doy cuenta es de que ya le puse un tinte personal a lo que hago, y eso define cómo canto folclore, tango o jazz. Siempre estudiando y aprendiendo”.
MIÉRCOLES
• De 9 a 11 para niños, y de 11 a 13, para adultos, en el Ismunt (Chacabuco 242).