15 Enero 2015 Seguir en 


La celebración del “Día sin pantalones en el subte”, que nació en Nueva York hace más de una década, ya llegó a 60 países, entre ellos, la Argentina. El lunes, cuando la canícula rozaba los 40 grados, varios usuarios subieron al sube luciendo su ropa interior. Los requisitos eran bajarse los pantalones en el subte y mantener la seriedad, sin gesticular ni reírse. La chanza sorprendió a muchos de los viajeros que, a pesar de todo, se mantuvieron en calma y sin protagonizar incidentes. Para evitar una degeneración de su objetivo, el evento tiene claramente prohibido la utilización de cualquier prenda “provocativa”: tangas, slips y frases insultantes estuvieron vetadas de la jornada.


