02 Noviembre 2014
ARENGA. López y Rojkés hablaron durante la inauguración de un FORO. prensa josé francisco lópez
Sin mencionar nombres, la senadora nacional Beatriz Rojkés repartió críticas por toda la oposición, de dentro y de fuera del peronismo, y defendió la gestión de su esposo, el gobernador, José Alperovich. Fue durante su discurso de apertura del Foro de Desarrollo Local y Proyecto Urbano, que se realizó ayer por la mañana en el hotel Catalinas Park, y del que también participaron el secretario de Obras Públicas de la Nación, José López, y la empresaria Catalina Lonac, entre otros. Rojkés aludió al amayista secretario de Gobierno de la Municipalidad capitalina, Germán Alfaro, al legislador massista Gerónimo Vargas Aignasse, y al diputado radical José Cano.
“La política no es denuncia, no es saltar de canal en canal criticando, denunciando, buscando señores que le mataron la hija, buscando mujeres con cáncer”, dijo la titular del Partido Justicialista, en referencia a Cano, que apareció en varios medios con Alberto Lebbos -papá de Paulina Lebbos, asesinada en 2006- y con la odontóloga Irma Galván, que denunció que fue echada del PAMI, pese a padecer de cáncer, para que en su lugar ingrese Sara Alperovich, hija de Rojkés y del gobernador.
“En Tucumán prácticamente no quedan planes; están las cooperativas, el Ellas Hacen, donde la obligación es la terminalidad educativa, la salud de los hijos, la capacitación, la formación. Tenemos carreras cortas con salida laboral. Esto es trabajar para la seguridad. No es un botón antipánico”, añadió, en alusión a Vargas Aignasse, que instaló en distintos barrios el programa llamado “Alerta Tucumán”. Con esa frase también pareció contestar a Alfaro, que había dicho que Tucumán estaba “minado de planes”. Y sumó otra velada respuesta al amayista, que había afirmado que acordar con el alperovichismo implicaba, entre otros, avalar la corrupción. “Cada peso llega donde corresponde; jamás podrán decir que el Gobierno de Alperovich sea corrupto. Lo podrán decir los que no tienen propuestas”, dijo Rojkés. Y luego, preguntó, retóricamente, a la audiencia: “¿ustedes se imaginan lo que puede ser una provincia administrada por alguien que nunca pagó una planilla de sueldos? ¿Se imaginan cómo generamos crecimiento en la provincia con una cabeza preparada sólo para la denuncia?”.
López también coló lo electoral en su discurso. Sugirió que con Gobiernos de otro signo podrían disminuir los recursos para la región, y lanzó un mensaje de unidad. “Este Gobierno destinó al norte el 54% del presupuesto para infraestructura. ¿Qué pasará con la transferencia de recursos? Si siguen Cristina (Fernández) y Alperovich no tengo dudas. Ahora, si no están, ¿qué va a pasar? No nos deben sorprender. No podemos tener una visión sectaria o sectorial”, manifestó.
Lonac también defendió al Gobierno: “Hay que tener mucho cuidado de no destruir lo bueno. Desde 2001 fue muy difícil el camino. Pero hoy tenemos las piezas listas para armar el rompecabezas. Tucumán está preparado para seguir haciendo historia”.
“La política no es denuncia, no es saltar de canal en canal criticando, denunciando, buscando señores que le mataron la hija, buscando mujeres con cáncer”, dijo la titular del Partido Justicialista, en referencia a Cano, que apareció en varios medios con Alberto Lebbos -papá de Paulina Lebbos, asesinada en 2006- y con la odontóloga Irma Galván, que denunció que fue echada del PAMI, pese a padecer de cáncer, para que en su lugar ingrese Sara Alperovich, hija de Rojkés y del gobernador.
“En Tucumán prácticamente no quedan planes; están las cooperativas, el Ellas Hacen, donde la obligación es la terminalidad educativa, la salud de los hijos, la capacitación, la formación. Tenemos carreras cortas con salida laboral. Esto es trabajar para la seguridad. No es un botón antipánico”, añadió, en alusión a Vargas Aignasse, que instaló en distintos barrios el programa llamado “Alerta Tucumán”. Con esa frase también pareció contestar a Alfaro, que había dicho que Tucumán estaba “minado de planes”. Y sumó otra velada respuesta al amayista, que había afirmado que acordar con el alperovichismo implicaba, entre otros, avalar la corrupción. “Cada peso llega donde corresponde; jamás podrán decir que el Gobierno de Alperovich sea corrupto. Lo podrán decir los que no tienen propuestas”, dijo Rojkés. Y luego, preguntó, retóricamente, a la audiencia: “¿ustedes se imaginan lo que puede ser una provincia administrada por alguien que nunca pagó una planilla de sueldos? ¿Se imaginan cómo generamos crecimiento en la provincia con una cabeza preparada sólo para la denuncia?”.
López también coló lo electoral en su discurso. Sugirió que con Gobiernos de otro signo podrían disminuir los recursos para la región, y lanzó un mensaje de unidad. “Este Gobierno destinó al norte el 54% del presupuesto para infraestructura. ¿Qué pasará con la transferencia de recursos? Si siguen Cristina (Fernández) y Alperovich no tengo dudas. Ahora, si no están, ¿qué va a pasar? No nos deben sorprender. No podemos tener una visión sectaria o sectorial”, manifestó.
Lonac también defendió al Gobierno: “Hay que tener mucho cuidado de no destruir lo bueno. Desde 2001 fue muy difícil el camino. Pero hoy tenemos las piezas listas para armar el rompecabezas. Tucumán está preparado para seguir haciendo historia”.
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