Trucos simples para combatir el mal humor

¿Quién no pasa momentos de mal humor en la vida diaria? O porque tengo que hacer una cola larguísima para pagar una factura o porque “justo hoy” se echó a perder el calefón y me quedé sin agua caliente o porque mis hijos se olvidaron que tenían que llevar ciertos materiales a la escuela y tengo que salir a última hora corriendo a comprarlos... En fin, situaciones domésticas, pequeños trastornos de salud, entre otras causas, le quitan el buen humor a cualquiera.

Todo esto se encuentra dentro de los parámetros normales. Pero, cuando se trata de una actitud con cierta permanencia, hay que tener cuidado y tratar de ver las causas que originan ese estado. Si una persona se convierte en un “malhumorado” es muy posible que esto le provoque dificultades tanto en sus relaciones interpersonales como en su propio desarrollo.

Diversas razones

“El mal genio es un mal que aqueja a muchas personas. Puede ser ocasionado por razones externas (tensiones, presiones), como también por circunstancias que lo afectan internamente (culpas, rencores, resentimientos). Quienes conviven con él en forma regular pueden perder los estribos por cosas que bien podrían arreglarse manteniendo la calma”, afirma el doctor Sergio Zimmer, médico cirujano, docente y periodista responsable del programa televisivo Proyecto Salud, que se emite en canales de cable de Buenos Aires.

Es que, por lo general, todos atravesamos por problemas que nos producen sufrimiento. Y para poder resolver es fundamental conocerlos, aceptarlos y aprender a vivir con ellos. Muchas veces consideramos como un problema lo que también podría verse como un desafío que la vida nos impone y que hasta nos puede permitir un aprendizaje y una oportunidad de evolucionar.

Pasar del mal humor al buen humor puede ser solamente una cuestión de actitud. Dos técnicas muy recomendadas por los especialistas son reírse más y relajarse. También da buenos resultados a la hora de mejorar el humor hacer actividad física. Eso permitirá desahogarse y, además, cansarse. De esa manera eliminará el exceso de hormonas relacionadas con el estrés, obtendrá una sensación de bienestar y de relajación, que le asegurarán un buen descanso por la noche.

Características
Cómo identificar a un “malhumorado”

Las personas en quienes el mal humor se ha convertido en una actitud permanente suelen no encontrar buenos motivos para mejorar su estado de ánimo.

Les molesta la compañía de los demás. Y, sin embargo, se quejan de que están solos. También suelen aburrirse ya que , por lo general, carecen de iniciativa propia para realizar actividades placenteras.

Son personas que siempre están hablando de sus problemas, pero rara vez son capaces de escuchar a los demás, ya sea que les cuenten malas o buenas noticias. Se los percibe disconformes todo el tiempo, intolerantes e individualistas, como si no hubiera nada que los pudiera hacer felices de alguna manera. Acostumbran canalizar a través del malhumor las energías negativas que surgen de sus desequilibrios emocionales. Lo malo es que esto suele convertirse en un hábito que se sostiene en el tiempo. Son muy difíciles de tratar, porque creen tener siempre la razón, y poseen una visión pesimista del mundo y de las personas que los rodean.