“Hablamos después”

Un poco más de 10 horas separan a San Luis de Tucumán. Sin embargo, algunos comentarios vuelan y llegan mucho más rápido a los oídos de La Ciudadela. Cuestiones como que la revancha para Juventud Unida de San Luis pinta fácil, o convencimientos al 100% de que el lunes será el puntano el que dejará sin nada a San Martín, fueron los rumores que sonaron. ¿Cómo cayeron? Martín Seri prefiere no seguir la corriente de combate, pero al mismo tiempo deja en claro el pensamiento colectivo del “santo”: “¿qué sentimos sobre esos comentarios? Esperaremos al lunes a ver qué pasa. Hablaremos después del partido. Antes vamos a demostrar todo en la cancha”.

El ahora lateral por derecha no se tentó con las chicanas lejanas, y prefirió analizar la revancha, que es lo que verdaderamente le importa. En este caso la espera no lo desespera, pese a que entiende que en el mundo San Martín sobran ganas por dar vuelta la serie y sacar boleto a “semis”. “Es claro que hay una ansiedad lógica de querer ganar el partido, o de convertir. Por eso la tranquilidad durante los 90’ será clave”, avisa.

Si bien ganando por cualquier resultado se hará del ticket a la siguiente fase, Seri anticipa un duelo incómodo. “También escuché declaraciones de ellos de que apostarán al contragolpe, pero... Eso no modifica demasiado lo que vamos a intentar, que tenemos que tener en claro cuáles son las armas que al rival le quedarán más cómodas”, analiza. La única idea que va, la de ganar o ganar, sólo le deja en claro que el grupo debe ser inteligente para no cometer el error que “Juve” espera para liquidar la revancha.

“No debemos volvernos locos. Tenemos 90’ para trabajarlo”, avisó Seri, obrero de un sueño de ascenso aún intacto.

Que el partido de vuelta se haya postergado para el lunes (a las 21.15) le da tiempo a Arnaldo Sialle de planificar cuál será el mejor San Martín disponible para parar en la cancha, sobre todo teniendo en cuenta que las prácticas con miras al encuentro recién comenzaron ayer y no el jueves, como se había pensado.

En este sentido, el DT deberá reponer la defensa y esperar la evolución de Aníbal Medina. “Tiene un esguince de tobillo. Pero está mejor, vamos a ver si llega aunque será difícil por los pocos días que tenemos para trabajar con él”, contó el médico Roberto Guillén.

Además, “Cacho” deberá resolver cómo reemplazará a Gonzalo Cáceres, el otro central que sumó la quinta amarilla y verá todo desde los palcos. “Para mí, ya tenía como siete amarillas y no sólo cinco, pero bueno ja, así está el fútbol argentino”, bromeó el santiagueño, esperando el informe del tribunal de disciplina, pero sin esperanzas de estar.

Ante las bajas, se le abre la puerta a Facundo Rivero para jugar de arranque. El defensor perdió sorpresivamente el puesto con Medina (en los últimos dos partidos) pero está disponible para volver a ser uno de los centrales.