07 Julio 2013
FOTO TOMADA DE VOCESESCRITAS.COM.AR
CATAMARCA.- El testigo de la "Masacre Capilla del Rosario" de 1974 José Gambarella señaló el lugar exacto donde fueron ejecutados 16 militantes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) en la visita ocular aérea y terrestre que se realizó en la causa por el hecho ocurrido el 12 de agosto de ese año.
El viernes, el testigo reconoció el lugar donde se perpetraron los fusilamientos, tras más de cuatro horas de inspección ocular en la Quebrada de los Walther, a 22 kilómetros al norte de la capital en el departamento Fray Mamerto Esquiú.
Gambarella relató que miembros del tribunal, los imputados, la querella y los testigos treparon por los inhóspitos montes y recorrieron la zona, de largo recorrido, que se realizó por una pendiente difícil acceso.
El testigo cumplía el servicio militar en 1974 y, además de presenciar el hecho, fue instado a ayudar luego a cargar un cuerpo.
El abogado querellante Guillermo Díaz Martínez aseguró que fue un día importantísimo para la causa. "Ya no queda ninguna duda del fusilamiento", dijo.
Gambarella "fue contundente una vez más, pues precisó el lugar exacto donde vio la rendición, los fusilamientos y quiénes fueron los que dispararon", insistió.
"Contó también dónde estaban los imputados Mario Nakagama, Carlos Eduardo Carrizo Salvadores y Jorge Acosta, es decir, puso tiempo y lugar y es por ello que el tribunal se va lleno de certezas y que esta medida era necesaria, por lo que estamos sumamente conformes", destacó el letrado.
En el mismo sentido, el abogado de la querella Bernardo Lobo Bugeau remarcó que la prueba es de "vital importancia para el proceso, en el que varios testigos hicieron conocer de primera mano al presidente del tribunal dónde estaban situados todos los imputados, sin excepción".
"Se comprobó el grado de responsabilidades y autorías de cada uno de los tres imputados con un grado de convicción suficiente para el tribunal y aún resta el aporte de sobrevivientes de la propia compañía de monte", concluyó. (Télam)
El viernes, el testigo reconoció el lugar donde se perpetraron los fusilamientos, tras más de cuatro horas de inspección ocular en la Quebrada de los Walther, a 22 kilómetros al norte de la capital en el departamento Fray Mamerto Esquiú.
Gambarella relató que miembros del tribunal, los imputados, la querella y los testigos treparon por los inhóspitos montes y recorrieron la zona, de largo recorrido, que se realizó por una pendiente difícil acceso.
El testigo cumplía el servicio militar en 1974 y, además de presenciar el hecho, fue instado a ayudar luego a cargar un cuerpo.
El abogado querellante Guillermo Díaz Martínez aseguró que fue un día importantísimo para la causa. "Ya no queda ninguna duda del fusilamiento", dijo.
Gambarella "fue contundente una vez más, pues precisó el lugar exacto donde vio la rendición, los fusilamientos y quiénes fueron los que dispararon", insistió.
"Contó también dónde estaban los imputados Mario Nakagama, Carlos Eduardo Carrizo Salvadores y Jorge Acosta, es decir, puso tiempo y lugar y es por ello que el tribunal se va lleno de certezas y que esta medida era necesaria, por lo que estamos sumamente conformes", destacó el letrado.
En el mismo sentido, el abogado de la querella Bernardo Lobo Bugeau remarcó que la prueba es de "vital importancia para el proceso, en el que varios testigos hicieron conocer de primera mano al presidente del tribunal dónde estaban situados todos los imputados, sin excepción".
"Se comprobó el grado de responsabilidades y autorías de cada uno de los tres imputados con un grado de convicción suficiente para el tribunal y aún resta el aporte de sobrevivientes de la propia compañía de monte", concluyó. (Télam)
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