Un estudio francés evalúa si el uso del corpiño produce la caída de los pechos

Un estudio francés evalúa si el uso del corpiño produce la caída de los pechos

Llegó a la conclusión de que quienes usaron sujetador tienen unos 7 milímetros mas caídas las mamas. Opinan especialistas tucumanos.

UN SHOW. Los ángeles y los corpiños de Victoria´s Secret son un clásico de la TV norteamericana: en 2012 se presentó el sostén más caro del mundo, con un valor de 2 millones de dólares. REUTERS UN SHOW. Los "ángeles" y los corpiños de Victoria´s Secret son un clásico de la TV norteamericana: en 2012 se presentó el sostén más caro del mundo, con un valor de 2 millones de dólares. REUTERS
04 Junio 2013

En el pasado fue una prenda de lujo y sacrificio, indispensable para que las mujeres resaltaran el busto y se ajustaran a las medidas promedio correspondientes a sus épocas. En el presente ya es imprescindible, es símbolo de comodidad y hasta de seducción. Pero el debate sobre el uso del corpiño vuelve a plantearse.

En los 70, los movimientos feministas quemaban estas prendas como símbolo de liberación de la opresión de los hombres y de sus sujetadores. Y hace unos días, el médico francés Jean-Denis Rouillon determinó que su uso no es bueno, porque neutraliza la sujeción muscular (la fuerza del músculo), produce dolores de espalda y no mantiene los pechos erguidos. Sin embargo, especialistas tucumanos se atreven a decir que al estudio francés le falta profundidad científica para llegar a lograr un resultado verídico.

"Como una rodillera"
Rouillon estudió durante 15 años los pechos de 330 mujeres de entre 18 y 35 años. En ese período de tiempo detectó que las que usaban corpiño tenían sus mamas más caídas, precisamente unos 7 milímetros. Los resultados fueron publicados recientemente en The New York Times, pero el investigador asegura que aún son datos preliminares.

El médico especialista en deportes, que además es investigador en la University Hospital of Besancon (al sur de Francia), dijo que no había hallado investigaciones previas sobre las bondades de esta prenda tan usada entre las mujeres. "Es como llevar una rodillera; el músculo deja de trabajar", razonó Rouillon.

Una de las mujeres que se prestó voluntariamente para ser evaluada, identificada como "Capucine", comentó sobre el resultado que le generó eliminar el corpiño de su vestimenta. "Una respira mejor, se para más derecha y tiene menos dolor de espalda", comentó la mujer de 28 años.

A pesar de su publicación, Rouillon resaltó que el resultado es preliminar y que sería peligroso aconsejar el desuso del corpiño.

Cuestión de comodidad
Según el cirujano plástico tucumano Eduardo Palazzo, el uso del sostén dependerá de cada mujer y de la comodidad que le produce tenerlo o no. Sobre el estudio, Palazzo indicó que no hay un aval científico para que sea serio y que no hay explicación anatómica ni fisiológica para que sea fidedigno. "Para las mujeres, el sostén es una cuestión de comodidad y no imposibilita el crecimiento ni glandular, ni muscular. Eso viene genéticamente. Si hay molestia con el sostén, se debe al tamaño de la mama. Además, hay que ver qué variables se tomaron en el estudio: si todas las pacientes tenían el mismo tamaño de busto, si tenían la misma presión del sostén sobre su cuerpo, entre otras. Creo que lo de Rouillon puede ser una observación, pero no tiene sostén científico aunque haya demorado 15 años en demostrarlo", opinó.

El traumatólogo Pablo Aguirre destacó que aunque este estudio no tiene mucha relación con su especialidad, desde el punto de vista anatómico el tamaño del busto es el que puede generar o no dolor de espalda, y no el corpiño.

Endurecer los músculos Luz Bonanno, personal trainer y esteticista, asegura que el secreto para lograr un busto firme no depende del sujetador. Para la entrenadora se necesitan ejercicios localizados y periódicos para darles firmeza a los tejidos mamarios. Bonanno explicó que hay que ejercitar el pectoral, uno de los músculos mas grandes del tren superior, que se encuentra detrás de los pechos "También hay que hacer un ejercicio completo, que incluya los demás músculos del tren superior, que son: el deltoides (parte del hombro), el bíceps y el tríceps (parte del brazo) y, obviamente, los dorsales (espalda). Esto ayudará a tener una mejor postura", destacó. También recomendó ejercicios para hacer en casa, en el parque o en un gimnasio (leer "Historia y Ejercicios").

HISTORIA Y EJERCICIOS

- Una prenda que superó los 100 años.- Corpiño, brassière, soutien, bra, sujetador. Los nombres cambian, pero siempre identifican a una misma prenda, que en 2007 cumplió 100 años. En el libro "El sostén. Mitos y leyendas... y manual de uso" , Francesc Puertas comenta que las primeras mujeres en utilizar una pieza que sujetaba el pecho fueron las de Creta, durante el 1.700 a. de C. Para las Romanas usar corpiño tenía otra connotación: significaba ser civilizadas. Pero el primer sostén moderno que se patentó fue el de Mary Phelps Jacob, en 1914, en la ciudad de Nueva York. Con dos pañuelos de seda y una cinta, Jacob se anticipó al sujetador moderno. En 1917, la revista Vogue publicó la imagen del primer corpiño (foto de la derecha). La rusa Ida Rosenthal fundó la empresa Maidenform, que se hizo famosa por introducir tazas de distintos talles. Desde ese momento se sucedieron todo tipo de inventos, como las almohadillas y los géneros livianos.

- Ejercicios para endurecer el busto.- La personal trainer Luz Bonanno recomienda ejercicios que podés hacer en tu casa o al aire libre y que te servirán para fortalecer el busto. "En un gimnasio podrías entrenar los pectorales haciendo remo; pecho plano o inclinado con la barra; y pecho plano e inclinado con mancuernas (serían aperturas laterales). Al aire libre, con personal trainer, se pueden hacer flexiones de brazos, abiertos a la altura del hombro. Si tenés experiencia en entrenamiento, podés hacer este ejercicio con las piernas estiradas. Y si sos principiante, apoyá las rodillas en el piso y bajá solamente el tren superior. También podés trabajar con las mancuernas, haciendo levantamientos laterales y frontales. Y en casa, agarrá dos botellas de agua mineral, rellenalas con agua, arena o tierra, acostate en el piso boca arriba y hacé aperturas (abrí y cerrá los brazos). Si tenés una banda elástica, agarrate de los extremos, estirala y cerrala".

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