MADRID, España.- El futbolista del Betis Miki Roqué murió a los 23 años tras una larga batalla contra un cáncer, informó hoy el club. Al jugador catalán se le había diagnosticado un cáncer pélvico en 2011.
Roqué dio sus primeros pasos en el Lleida de la segunda división, desde donde fue transferido a los 17 años al Liverpool.
En 2006, el club inglés lo cedió a préstamo al Oldham Athletic y luego regresó a España para jugar en el Xerez y el Cartagena, antes de unirse a las filas del Betis en 2009.
La muerte de Roqué será probablemente recordada con un minuto de silencio este miércoles en el duelo de semifinales de la Eurocopa entre España y Portugal en la ciudad ucraniana de Donetsk. (DPA)