Sagitario alentó a Mandela a no bajar los brazos

Sagitario alentó a Mandela a no bajar los brazos

21 Marzo 2012
¿Cómo es una carta natal en un caso concreto? Diego Escaño muestra la posición de los astros en la vida de un gran líder como Nelson Mandela. Nació el 18 de julio de 1918 a las 14.54, con el sol en Cáncer y el ascendente en Sagitario. "Cáncer es un signo de agua y cardinal. El agua tiene que ver con las emociones (de allí la increíble emotividad de este maravilloso hombre por la vida y las personas). Los signos cardinales se relacionan con el comienzo y el emprendimiento", explica. Mandela siempre se destacó por no bajar los brazos, por ser un emprendedor nato.

"El ascendente representa la personalidad y en este caso corresponde a Sagitario, un signo de fuego y mutable. El fuego representa el impulso y el espíritu, de allí la fuerza espiritual de Mandela. El signo mutable representa la facilidad para ser flexible, y esto lo dejó demostrado con sus años en la cárcel y su entereza -resume-. Sagitario es un signo muy espiritual, un buscador nato; es el arquero del zodíaco que dirige su flecha hacia objetivos precisos. Mandela tenía un objetivo, la liberación de Sudáfrica como nación independiente, y lo logró".

"En la carta astral de Mandela también se ve la influencia de la luna y en el signo de Virgo. De allí los sacrificios que fue capaz de hacer para conseguir todo lo que se propuso -agrega-. Neptuno también tiene influencia en su vida. Representa el sentido de la totalidad y la unidad de la vida. Por su posición, Mandela es un hombre sumamente preciso en su pensamiento. Esta posición habilita a una persona a tener una visión completa del cuadro, a ver el bosque, no sólo el árbol". Pero esta posición también advierte sobre el deseo de ver lo que hay de bello y de divino en lo que nos rodea. El nativo no se siente cómodo al expresarse mediante los canales de comunicación habituales. "Lo que Mandela nos legó y enseñó se expresa a través de la poesía, la danza, el canto o una imagen", señala el experto. Por último Escaño afirma que Venus se encuentra opuesto al ascendente. Este planeta representa el amor. El ascendente es el Yo, y el descendente (el signo que desciende por el oeste) son los demás, es la humanidad. Queda claro aquí que el amor al servicio de la humanidad fue y es el estandarte de este gran hombre".

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