03 Septiembre 2011
USHUAIA.- Un hombre fue demorado y más tarde liberado en la ciudad de Río Grande, Tierra del Fuego, luego de que se encontrara en sus manos un poder sobre una vivienda de Hurlingham y $ 30.000, que hicieron sospechar que podía estar vinculado al caso de Candela Rodríguez.
Fuentes de la Policía fueguina comentaron que el procedimiento se realizó el jueves a la noche, por motivos ajenos a la causa de Candela. Los voceros dijeron que se pusieron en contacto con la Justicia de Morón, desde donde horas más tarde se dispuso que fuera liberado.
El hombre demorado fue identificado como Desiderio Ibarra, de 46 años, oriundo del partido de Tres de Febrero y quien había llegado a Río Grande hacía pocas horas. Según las fuentes, la policía llegó a él cuando seguía en el marco de otra causa a una mujer con antecedentes penales que lo acompañaba.
Según las fuentes, el título de propiedad que llevaba Ibarra indicaba una reciente transferencia del inmueble entre dos personas. Esa transferencia, se realizó en una escribanía de Río Grande y se cree que Ibarra actuó como apoderado para que pudiera efectivizarse, según la pesquisa. Pero luego se comprobó que no era el mismo domicilio que investigaban por la muerte de Candela. (Télam)
Fuentes de la Policía fueguina comentaron que el procedimiento se realizó el jueves a la noche, por motivos ajenos a la causa de Candela. Los voceros dijeron que se pusieron en contacto con la Justicia de Morón, desde donde horas más tarde se dispuso que fuera liberado.
El hombre demorado fue identificado como Desiderio Ibarra, de 46 años, oriundo del partido de Tres de Febrero y quien había llegado a Río Grande hacía pocas horas. Según las fuentes, la policía llegó a él cuando seguía en el marco de otra causa a una mujer con antecedentes penales que lo acompañaba.
Según las fuentes, el título de propiedad que llevaba Ibarra indicaba una reciente transferencia del inmueble entre dos personas. Esa transferencia, se realizó en una escribanía de Río Grande y se cree que Ibarra actuó como apoderado para que pudiera efectivizarse, según la pesquisa. Pero luego se comprobó que no era el mismo domicilio que investigaban por la muerte de Candela. (Télam)
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