Una ceremonia ancestral y popular

Una ceremonia ancestral y popular

RITUAL. Lugareños y foráneos entregan sus ofrendas a la Madre Tierra. RITUAL. Lugareños y foráneos entregan sus ofrendas a la Madre Tierra.
13 Junio 2011
Una de las herencias del imperio incaico en el norte argentino es la adoración a la Madre Tierra. La creencia de los pueblos originarios es que la Pachamama tiene el poder para hacer crecer las cosechas, multiplicar el ganado, cuidar los animales silvestres y bendecir el trabajo de los artesanos.

Los lugareños le rinden culto con ofrendas de diversas características, entre las más tradicionales aparecen hojas de coca, vino, chicha, aloja, comida, cigarrillos, yerba, entre otras. "Pachamama, kusilla, kusilla (se propicia, se propicia)" repiten durante la veneración.

La fecundidad

El festejo en honor de la Pachamama se realiza el 1 de agosto en Amaicha del Valle, a 15 kilómetros de Encalilla. Al menos por un día, los lugareños y algunos turistas hacen sus ofrendas a la Pachamama para agradecerle o para pedirle favores. Para los pueblos calchaquíes, agosto es el mes de la fecundidad, cuando llegan las primeras lluvias y la Madre Tierra está preñada. Ese día, los lugareños cumplen el ritual de tomar té de ruda.

Atractivo turístico

La bandera Uipala flamea en una loma del cerro a la espera del ritual, en el que se destapa la boca de la Madre Tierra para retirar las ofrendas del año anterior.

Los homenajes a la Pachamama se convierten cada año en un atractivo turístico en los Valles Calchaquíes. Otra tradicional festividad en honor a la Madre Tierra se realiza en Amaicha a principios de marzo. Este año se hizo la 64ª edición de la Fiesta Nacional de la Pachamama.

Doña Andrea Avelina de Balderrama fue la representante elegida para 2011 por ser la anciana mayor.

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