Sobrevuelan varios problemas en torno de la seguridad

Sobrevuelan varios problemas en torno de la seguridad

Los desafíos que deberá afrontar Jorge Racedo, el nuevo Jefe de Policía.

Se viene un cambio. Pero no será profundo. Jorge Racedo se pondrá al frente de una fuerza golpeada por los conflictos internos y por los reclamos sociales de más seguridad. El aumento salarial histórico que obtuvieron deja a los uniformados sin pretextos: ya no podrán mostrarse desganados al momento de atender las denuncias diversas de los tucumanos. Sin embargo, la nueva cúpula deberá lidiar con la burocracia
estatal, que provoca que muchos agentes deban ocupar su tiempo en cuestiones más políticas que de patrullaje y de prevención del delito.

Mostrar que los miles de policías que ingresaron a la fuerza los últimos años existen y están para resguardar a la población será un desafío grande para Racedo. Otra cuestión no menor que deberá abordar el flamente jefe es el ordenamiento interno. El reclamo de sindicalización de la fuerza quedó flotando con potencia, cual barrilete que pide más hilo y amenaza con volar sin ataduras cuando el viento sopla fuerte.

Se concrete o no esa medida, los mandos más encumbrados de la Policía tendrán que encontrar la fórmula para recomponer la cadena de mandos y esquivar otra posible revuelta que deje sin protección a los ciudadanos. El rol del ministro de Seguridad Ciudadana, Mario López Herrera, no será menor. O no debería serlo. Una cabeza política con presencia, con poder de decisión y con trato directo con la plana mayor de la Policía ofrece tranquilidad y reglas claras a toda la fuerza.

Su figura es estratégica para un área del Estado cuyos integrantes están acostumbrados a seguir órdenes precisas y a buscar un líder que inspire respeto y que ordene, literalmente, la tropa. El funcionario se juega en esta partida quizás su última carta para mostrarse como el hombre que gestó proyectos de seguridad clave, objetivo que hasta ahora no pudo alcanzar. LA GACETA ©

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