Sus piezas seducían también a los mayores

BUENOS AIRES.- Hugo Midón tenía muy en claro que el teatro para niños no era un género menor. Y que, por eso mismo, debía adecuarse a la realidad de ese público especial.
"Los chicos de hoy son muy rápidos, muy inteligentes, sensibles para relacionar los hechos y entender las cosas. Tienen más comprensión, discernimiento y objetividad para ver las cosas. Los niños se enfrentan con la verdad de lo que ocurre", comentó en una entrevista concedida al diario porteño "La Nación".
En este sentido, consideraba que el teatro para niños es una alternativa frente a lo que los tiene muy atrapados: la televisión y los juegos de la computadora. "Comprenden rápidamente los códigos de cada medio: saben bien que el cine es el cine y la computadora, la computadora; a ningún chico, por pequeño que sea, se le ocurriría tomar un control para tratar de cambiar una escena en el teatro. Además, fruto de que los padres de hoy son mucho más claros con sus hijos, los chicos tienen muchos menos temores", agregó el creador.
Midón también fue muy crítico con la televisión y con los productos para niños que emiten los canales: "tienen mucho dibujito y lo que yo llamaba la estética del porrazo: cada treinta segundos hay un personaje que se estrella contra algún lado o que vuela como consecuencia de una piña, y esas son situaciones de mucha violencia".
Por esa razón, sus piezas tenían y seguirán teniendo la característica de encantar también a los mayores, siempre a fuerza de interés, belleza y una concepción que entendía el teatro como una fuente de placer y juego. (Especial)