28 Enero 2011
ESTACIÓN EL PROVINCIAL

Brego porque el edificio del El Provincial no se venga abajo. Apoyo los dichos de la arquitecta Olga Paterlini: "El problema de la jurisdicción se puede resolver cuando hay intención de hacer acuerdos... Lo que tiene que haber es voluntad". Y esto es lo que le falta a nuestras autoridades, voluntad de llegar a acuerdos y salvar este histórico edificio. ¿Alguien se acuerda del ex Banco Nación, ex Rentas ubicado en Maipú y San Martín? Hace ya un año que se llevó a cabo -luego de varias intervenciones por parte de los ciudadanos para salvarlo de la piqueta-, el tan mentado concurso para preservarlo y hasta la fecha las autoridades no dieron muestras de iniciar las tareas de reciclaje. ¿Se espera que se caiga por la acción del tiempo para luego levantar otro edificio?

Juana M. Farías

PRESO POLÍTICO

El 26 de enero de 1933, durante el golpe de estado de Uriburu, desembarcaron confinados en la isla de San Julián altos dirigentes radicales. Los doctores Alberto Aybar Augier, Honorio Pueyrredón, José P. Tamborini y Carlos Noel fueron recordados en este diario en la sección Apenas Ayer por el doctor Carlos Páez de la Torre (29/7/08). Fue el poder de oratoria y de redacción de Aybar Augier lo que mantuvo en vilo a todos los medios respecto de la suerte de los confinados en la cárcel más peligrosa del país, donde estuvieron Cayetano Santos Godino y los asesinos más temibles. Aybar Augier fue diputado provincial en 1918, presidente de la Cámara de Diputados y senador nacional por Tucumán en 1921, luego de ganarle las internas por 13 votos contra 10 a Octaviano Vera. Pertenecía a la línea de los radicales denominados azules; fue nieto de Marcelino Augier un gobernador de Catamarca en 1840. Llevó una vida austera y falleció el 9/10/1950. Fue el senador que sucedió a Brígido Terán y posteriormente por Alfredo Guzmán. Debería recordárselo como a uno de los primeros presos políticos de Tucumán.

Martín Javier Augier
martin_augier99@hotmail.com

BASURA EN LA QUEBRADA

Al cruzar la ruta 301 se observa nuestra bella Quebrada de Lules y los ríos cristalinos y puros que bajan del cerro. Sin embargo, también se ven montañas de basura acumulada a la vera del río, desechos que se transportan en camiones desde Tucumán y otros lugares. Ante esta situación, lo más evidente es que piensan que los luleños tenemos espacio de sobra para guardar la basura de otros y que aquella gente que tira desperdicios parece no saber la magnitud del daño ocasionado por sus hechos. ¿Acaso las autoridades no podrían endurecer las ordenanzas y, a través de la Policía, detener y secuestrar todo vehículo que ingrese al río transportando basura o extrayendo áridos? Pero para que esto suceda precisamos que la vocación de servicio que se proclama en tiempos electorales, hoy también se ponga de manifiesto y, que el Gobierno provincial aumente los efectivos que necesita nuestra olvidada y desaliñada comisaría. Es claro que si no se toman medidas serias, seguiremos predicando en el desierto y Lules será tierra de nadie en un futuro para nada lejano. El editorial del 20/1 nos enseña que no se puede querer ni preservar lo que no se conoce . Tirar basura a la ciudad, es tirar la ciudad a la basura.

Víctor Hugo Rodríguez
Manuel Ballesteros 264
San Isidro de Lules


SIN TELÉFONO

A través de este espacio que nos brinda LA GACETA, quiero dirigirme a las autoridades de Telecom, de cuyos servicios soy beneficiario. Desde hace aproximadamente cinco meses, pago la factura mensual sin que me brinden el servicio que abono. ¿Por qué ante reiterados reclamos no me dan una solución? En reiteradas oportunidades, el técnico que cubre la zona, me comunicó que no cuenta con los elementos para reparar una línea y que la empresa no le da respuesta. Transcribo el código de gestión de algunos de los reclamos que realicé: 17WJVOPY-18QM402. Idéntica situación vive una vecina anciana que vive sola y jamás logró que repararan la famosa caja que el empleado dice hay que cambiar.

Roberto Oscar Juárez
Libertad 735-Barrio Palomar
Bella Vista-Tucumán

PROTESTA RUIDOSA

Los tan mentados derechos humanos seguramente se respetan en cualquier provincia o país. Aquí en Tucumán, no. Vivo con una tía de 95 años, postrada en cama, en Las Piedras al 1.200, frente a la sede de un correo privado. Los empleados reclaman (con toda razón) deudas salariales y despidos; pero lo hacen de la peor manera: tiran bombas, queman cubiertas, tocan redoblantes, ensucian veredas y umbral de las casas, afectando a los vecinos que no tenemos ninguna culpa. La policía "cuida" que no agredan la sede del correo y no hacen nada. ¿Y el dueño? ¿Acaso disfrutando el sol en alguna playa? ¿Quién defiende nuestros derechos?

Eugenia Berboff
eaberboff@hotmail.com

MARÍA ELENA WALSH

"Si has logrado que un niño te entienda, el universo es tuyo". No me pidas que no llore o que mi alma no sienta pena. No te olvides, María Elena, que tu voz me la alegraba. Recuerdo -cuando niño y en esas siestas interminables de lluvias invernales- cómo el Winco con su altos parlantes de lata simulaba un escenario del cual brotaba un voz frágil, dulce y aflautada que nos hablaba con un curiosos idiomas sobre mundos fantásticos, de miedos, temores, de dudas, de sinrazones? No había lógica en la perfecta rima pero flotaba un fantasma lírico lleno de filosofía. "El Diablo Inglés", ¡qué miedo!, pero? "¡Vamos a jugar", nos decías, y el vinilo giraba, la púa raspaba y el sonido venía, te abrazaba, te envolvía. Te traía el mundo de Alicia y el Mago de Oz, los hermanos Green, pero en criollo y con "ñ", con mate, bollo, con locro, con tortugas, monos lisos, grillos, gatos, vacas? ¡Gracias, María Elena! Hoy mis hijos te conocen y te extrañan mientras aprendices de genios invasores quieren con sus monstruosos dibujos desdibujar tu magia, mientras el corso de la violencia y los disvalores parecen reírse de tu suerte, ignorando que te has vuelto raíz de los árboles que forman las últimas generaciones de esta bienhechora y bicentenaria patria. Ya no le temo a la Reina Batata, no me da miedo el Brujo de Gulubú. Te escucharé y recordaré siempre en el camarote de mi Barco Quieto y serás eternamente Como la cigarra en esta Tierra de Uno.

Damián José Paz
damianpazr@yahoo.com.ar

ABUSO DE AUTORIDAD

Quiero denunciar un abuso de autoridad por parte de la Policía. En San Pedro de Colalao, luego de las 4 AM, esta corre a todas las personas que se encuentren en la plaza del pueblo ya sean adultos, adolescentes o niños. Cuando se lo interroga a algún policía para saber por qué no se puede estar en la plaza pública, no saben que responder. Y si se pregunta demasiado, amenazan con llevarte a la comisaría. ¿En qué parte del mundo que rige la democracia no dejan permanecer en un espacio público? Realmente, no comprendo la situación y espero que esto cambie. Y considero que es un abuso del poder.

Verónica Goldman
goldmanvero@gmail.com


SERVICIO MILITAR

Hice el servicio militar en 1985. Me cortó mi carrera universitaria; la disciplina que había me parecía tonta o ridícula, no necesitaba aprender orden porque era una persona ordenada. Además no me gustaba para nada el uso de armas y como corolario tenía un superior que era homosexual (y no me vengan con eso de la discriminación por favor). Pero, no por esta experiencia, creo que esté mal su implementación. Es más, muchos de esos jóvenes que no estudian ni trabajan, soberbios y que además delinquen necesitarían del servicio militar. Ahí aprenderían muchos de los valores que lamentablemente sus padres no les enseñaron. 

Juan José Soria

Las cartas para esta sección deben tener un máximo de 200 palabras, en caso contrario serán sintetizadas. Deberán ser entregadas en Mendoza 654 o en cualquiera de nuestras corresponsalías haciendo constar nombre y domicilio del remitente. El portador deberá concurrir con su documento de identidad. También podrán ser enviadas por e-mail a: cartasaldirector@lagaceta.com.ar,  consignando domicilio real y Nº de teléfono y de documento de identidad. LA GACETA se reserva el derecho de publicación.

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